El daño que le hace a los pulmones el tabaco, o el fumar diferentes elementos puede ser irreparable, dejando enfermedades a su paso como la pulmonar obstructiva crónica, conocida como Epoc, hasta el cáncer que es el que con mayor frecuencia se identifica. Sin embargo, al dejar de fumar e introducir otros hábitos, las personas afectadas pueden llegar a presentar mejorías en su estado de salud.
El portal estadounidense Kids Health, explicó que los pulmones son los órganos del cuerpo que permiten la entrada del oxígeno a través del proceso llamado inspiración y luego, expulsan el dióxido de carbono producido en el organismo por la exhalación. “Las células de nuestro cuerpo necesitan oxígeno para vivir. Cuando estas células hacen su trabajo, generan dióxido de carbono”, continuó asegurando, haciendo énfasis en la importancia que tiene estos dos procesos para la vida.
Entre tanto, cuando se adquieren malos hábitos como el de fumar, los pulmones pueden llegar a afectarse al punto de dejar de funcionar y provocar incluso, la muerte. Según recoge la American Cancer Society, más de 480 mil personas mueren al año en Estados Unidos por enfermedades relacionadas con el consumo de tabaco, y hacen una comparación, afirmando que aproximadamente, una de cada cinco muertes en el gigante norteamericano se debe a esta problemática.
“El hábito de fumar cigarrillos mata a más estadounidenses que el alcohol, los accidentes automovilísticos, el SIDA, las armas de fuego, y las drogas ilegales en conjunto... Fumar acorta la vida de fumadores masculinos por unos 12 años y la vida de las fumadoras por aproximadamente 11 años”, advierte la organización sobre las consecuencias del consumo de tabaco en las personas.
Esta organización agrega que, este tipo de hábito no solo causa cáncer, como es frecuente escuchar, sino que también puede llegar a dañar varios órganos internos, entre ellos el corazón, los genitales, los ojos, los huesos, la boca, la piel, entre otros. Empero, el cáncer tiende a ser el 30 % del total de muertes en Estados Unidos, de los cuales el 80 % corresponde a cáncer de pulmón.
La American Cancer Society recalca que los beneficios de dejar de fumar llegan incluso, luego de 20 minutos de dejar de hacerlo, y entre el primer mes y los nueve meses de evitar el consumo de tabaco, “disminuyen la tos y la dificultad para respirar. Las estructuras parecidas a vellos pequeños que eliminan el moco de los pulmones (los cilios) empiezan a recuperar su función normal en los pulmones, lo que aumenta la capacidad para controlar las mucosidades”, aseguró.
Ante este panorama, es importante recalcar que las mejorías del sistema respiratorio se pueden impulsar si se implementa el consumo de algunos alimentos, que por sus propiedades, pueden lograr que se mejore más rápido el sistema respiratorio infectado por las sustancias que contienen los cigarrillos.
El primer alimento, que sería primordial par integrar en la recuperación de los pulmones, sería la cebolla, la cual contiene antioxidantes que eliminan las toxinas del cuerpo, según recoge el portal Nurses Daily, este vegetal se puede consumir tanto crudo, como hervido en una infusión para lograr obtener todos los beneficios.
Otro de los alimentos a implementar en la dieta es la toronja, que según el portal mencionado, debería consumirse hasta cuatro veces en la semana para reducir las probabilidades de padecer de cáncer de pulmón. El jengibre al igual que la cebolla, también ayuda a la expulsión de toxinas del cuerpo, por lo que el consumo regular de este ingrediente es crucial para mejorar el sistema respiratorio.
La piña y el jugo de arándanos también son los otros dos alimentos necesarios, ya que por su parte, la piña logra que los antioxidantes que contiene mejoren como tal el sistema afectado por el consumo de tabaco, mientras que los arándonos atacan las bacterias que se crean en el organismo por el hábito mencionado.