Saber cuándo ir a emergencias es una de las habilidades que las personas deberían tener. Aunque no todos los individuos escogen profesiones relacionadas con las ciencias de la salud, es fundamental tener conocimiento, al menos, en primeros auxilios. Esto será de gran ayuda en momentos de crisis y puede salvar vidas.
Para medir el pulso cardíaco, en primer lugar, es pertinente aclarar los términos pulso y frecuencia. El pulso es “el latido de las arterias que se genera cada vez que el corazón se contrae. Tomando el pulso podemos saber la frecuencia cardíaca y conocer si esta es normal, si es regular o irregular. De esta forma fácilmente podemos definir el ritmo del corazón”, explica la Fundación Española del Corazón.
Medir el pulso es importante porque esto permite ver qué tan bien está funcionando el corazón. Por ejemplo, en un escenario de emergencia, cuando una persona se desmaya, tomar el pulso, permite saber si el corazón está bombeando sangre.
Medir el pulso
Además de la muñeca y el cuello, el pulso puede tomarse en otras partes del cuerpo. Según explica Medline Plus, Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, “el pulso se puede medir en zonas por las cuales la arteria pasa cerca de la piel. Estas incluyen: la parte posterior de las rodillas la ingle, la sien, la parte alta o la cara interna del pie.
Mano
Tomar el pulso en la muñeca es una de las formas más comunes de hacerlo. Es importante tener un reloj segundero, ya que contar manualmente puede no ser eficiente y arrojar un resultado equivocado. Por lo general, en los hogares suele haber un reloj de pared que puede funcionar o cronómetro del celular.
- Antes de tomar el pulso, es fundamental sentarse y descansar minutos antes.
- Extender uno de los brazos, con la palma de la mano hacia arriba, como si se estuviera recibiendo algo.
- Se deben poner los dedos índice y medio en la muñeca de la mano que está extendida, debajo de la base del pulgar. Mover y hacer ligera presión con los dedos hasta sentir el pulso. La concentración es indispensable para poder encontrarlo.
- Al sentir el pulso, contar cuántos latidos hay en 1 minuto. O también puede contar los latidos durante 30 segundos y multiplicarlos por 2. Así obtendrá la frecuencia cardíaca.
Cuello
- El pulso de la carótida puede tomarse en ambos lados del cuello, por lo que se puede elegir cualquiera de las dos áreas.
- Poner la punta del dedo índice y el dedo medio en la zona hundida del cuello, de forma vertical a la tráquea, hasta sentir el pulso. Es importante no presionar la arteria carótida en ambos lados del cuello, ya que puede causar una sensación de mareo.
- Al sentir el pulso, contar cuántos latidos hay en 1 minuto. O también puede contar los latidos durante 30 segundos y multiplicarlos por 2. Así obtendrá la frecuencia cardíaca.
Rango normal
La frecuencia regular del corazón de un adulto (en reposo) oscila entre 60 y 100 latidos por minuto. Se debe tener en cuenta que factores como la edad, condición física, tener enfermedades cardiovasculares, colesterol o diabetes, emociones, posición y tamaño del cuerpo y tomar medicamentos son factores que influyen en la frecuencia cardíaca, señala Mayo Clinic. Si los valores no son regulares se debe acudir inmediatamente a un centro médico para evitar mayores complicaciones en el estado de salud.