El agotamiento, la edad, la falta de vitaminas y la disminución en la producción de colágeno son algunas de las causas que pueden potenciar la aparición de las temidas ojeras, las cuales hacen lucir un rostro más cansado.

Las ojeras se forman debajo de los ojos y se caracterizan por ser manchas oscuras, de tonos violáceos o muy oscuros debido a una posible acumulación de toxinas y agua, más visibles en esta zona del rostro por ser especialmente fina y delicada, según explica Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.

Sin embargo, existen otros factores que pueden incidir en la aparición de las ojeras como lo son las enfermedades renales, el hipotiroidismo, una dieta inadecuada o la acumulación de toxina. Por ello, algunos recurren al maquillaje para ocultarlas, otros buscan tratamientos y opciones cosméticas para eliminarlas.

De acuerdo con expertos, las ojeras se pueden clasificar en dos tipos: las pigmentadas y las vasculares, también conocidas como “valle de lágrimas”. “Las ojeras pigmentadas suelen ser consecuencia de eccemas o de un aumento de melanina en la piel de los párpados por herencia genética. En cambio, las vasculares pueden ser más consecuencia de un mal estilo de vida, como tabaquismo, mala nutrición, estrés. Estas últimas suelen estar relacionadas con el envejecimiento o la disminución excesiva de la grasa facial”, explica la clínica Creu Blanca Barcelona.

En ese sentido, dos enemigos a la hora de evitar la aparición de ojeras son el exceso de sal y el alcohol. El exceso de sal genera retención de líquidos, por lo que favorece la generación de ojeras y bolsas en los ojos. Igual que un exceso de alcohol, que provoca una mayor dilatación de los vasos sanguíneos que, junto a las toxinas que se acumulan, pueden llegar a pronunciar las ojeras.

“Todos los alimentos procesados tienden a llevar más sal, azúcares o grasas respecto a los alimentos más naturales, por lo que pueden generar también más concentración de toxinas en nuestro cuerpo, reflejándose en las zonas donde la piel es más delgada, como en las ojeras”, agrega la entidad.

En cuanto a los alimentos que pueden ayudar a mejorar el aspecto de las ojeras, teniendo en cuenta que, al fin, el factor genético es siempre decisivo, encontramos los siguientes:

Carne roja

Los alimentos ricos en hierro ayudan a evitar anemias, de manera que se mejora la oxigenación de los tejidos. Este mineral se encuentra en alimentos como la carne roja, el brócoli, las legumbres, el marisco o los frutos secos. Sin embargo, es conveniente consumir carne roja (una o dos veces por semana) con moderación, ya que, si bien contiene mucho hierro, algunas investigaciones han relacionado su consumo con un mayor riesgo de padecer determinadas enfermedades.

Kiwi

Esta fruta es un poderoso antioxidante que ayuda a combatir las toxinas y radicales libres de la piel, ayudando a la generación de colágeno, encargado de rellenar la piel dándole luminosidad y brillo.

Huevo

Además de ricos en proteínas de alto valor biológico, lo que significa que contienen todos los aminoácidos esenciales, los huevos son también una buena fuente de vitamina A, la cual actúa como encargada de proteger de los rayos solares, generando más melanina, la responsable de la pigmentación de la piel.

Brócoli

Al igual que alimentos como la piña, las patatas, los cereales, las verduras de hoja verde o el salmón, el brócoli es rico en vitamina K. Esta mejora la circulación sanguínea, por lo que cumple un papel importante en el cuidado y mantenimiento de la piel.