El colesterol es una sustancia cerosa que suele ser similar a la grasa y se encuentra en todas las células del cuerpo. Dicha sustancia se necesita para producir hormonas, vitamina D y otras sustancias que ayudan a digerir alimentos, según explica Medline Plus.

A pesar de que este componente es producido por el cuerpo según las cantidades que este necesite, también se puede encontrar en alimentos de origen animal, como yemas de huevo, carne y queso.

Sin embargo, hay problemas cuando el sistema inmunológico detecta que hay un problema y envía glóbulos blancos para atacar el colesterol, pues se forma una capa sobre el colesterol que puede llegar a generar inflamaciones o, en el peor de los casos, estas placas se pueden desprender y causar un ataque al corazón o, también, bloquear completamente el flujo sanguíneo de una arteria.

Nunca es tarde para adoptar mejores hábitos alimentarios. Así como años de mala alimentación pueden hacerle bastante daño al cuerpo, mejorarla puede tener grandes réditos para la salud.

Expertos recomiendan los siguientes hábitos alimentarios para reducir el colesterol y los riesgos que este puede traer a la salud.

  1. Reducir el consumo de carnes y aumentar el de vegetales. Es importante hacer una balanza en la alimentación. No comer carne al menos un día por semana podría beneficiar bastante la salud de quienes sufren de colesterol alto en la sangre. Por esta razón, recomienda ingerir más verduras y otros alimentos como frutas, legumbres, semillas y frutos secos, pues estos alimentos contienen nutrientes esenciales como antioxidantes y fibras que le harán bien al corazón.
  1. Ingerir más grasas saludables en la dieta. Alimentos de grasas saludables ayudarán a reducir los niveles de colesterol LDL, que es conocido como “colesterol malo”. Entre los alimentos más recomendados están el aguacate, los frutos secos, el aceite de oliva y las semillas.
  1. Reducir el consumo de azúcares saturados. Los alimentos como galletas, jugos, gaseosas y postres contienen un nivel muy alto de azúcares saturados, por lo que contribuyen a aumentar el colesterol LDL en la sangre. En su lugar, se deben ingerir alimentos naturales como frutas por su cantidad de fibra y antioxidantes, propiedades ganadoras en la reducción del LDL.
  1. Aumentar la ingesta de fibra. Una dieta con más de 22 gramos al día de alimentos ricos en fibra son ideales para reducir el colesterol en la sangre. La fibra soluble ayuda a reducir los niveles de colesterol y esta se puede encontrar en alimentos como avena, vegetales, legumbres, semillas, frutos secos y frutas, entre otras opciones.
  1. Adicionarle grasas buenas a su dieta. Las grasas llamadas no saturadas pueden encontrarse en alimentos como aceitunas, nueces, aguacate y pescado.
  1. Reducir las grasas saturadas. Las grasas saturadas se pueden encontrar generalmente en alimentos como la carne grasa y los lácteos. Por esto, es importante elegir cortes magros de carne y tratar de sustituir partes de este tipo de alimentos por otros como los vegetales.
  1. Eliminar fuentes artificiales de grasas trans. Para eliminar dichas fuentes de las denominadas grasas trans, es importante eliminar de tajo alimentos ultraprocesados y envasados.
  1. Consumir menos azúcar. El azúcar se puede encontrar en alimentos procesados como galletas, helados, bebidas azucaradas como gaseosas o jugos artificiales que no tienen mayor aporte nutricional, pero sí muchos azúcares. Por esto, lo ideal es consumir fuentes naturales de azúcar como frutas que, además, tienen una alta carga de vitaminas y minerales.