Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) señalan que el consumo de frutas y verduras pueden reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares o incluso diabetes, lo que no quiere decir que eliminen las posibilidades de su desarrollo.

Por su parte, la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos (MedlinePlus) menciona que “una dieta saludable abarca la adición de verduras y frutas todos los días. Las verduras como el brócoli, los frijoles verdes, las hortalizas de hoja, el calabacín, la coliflor, el repollo, las zanahorias y los tomates son bajos en calorías y ricos en minerales, fibra y vitaminas”.

Por esto, alimentos como la mandarina pueden ser útiles para el bienestar del cuerpo porque es una fruta compuesta de vitamina C, con la capacidad de fortalecer el sistema inmunológico, reduciendo el desarrollo de afecciones como las gripes, asegura Tua Saúde.

Asimismo, el sitio web explica que su fibra puede contrarrestar el estreñimiento porque estimula el movimiento intestinal, incluso puede ser beneficioso para la microbiota.

La mandarina está compuesta de vitamina C. | Foto: GettyImages

Cabe recordar que según el National Institute of Diabetes and Digestive and Kidney Diseases, el estreñimiento es “una afección en la cual la persona podría tener menos de tres evacuaciones a la semana”. Además, el autocuidado es primordial, donde se prioriza la modificación de hábitos alimenticios.

Continuando, la mandarina, al estar compuesta de zeaxantina y luteína, procura el cuidado de los ojos, reduciendo la posibilidad de alguna enfermedad como las cataratas. Asimismo, MedlinePlus señala que se le considera como la “vitamina del ojo”.

Una taza de gajos de mandarina aporta entre un 2 % y un 4 % de la ingesta diaria recomendada de estos tres minerales | Foto: Libre de derechos

A la lista de beneficios se suma su capacidad de contrarrestar el colesterol LDL que, de acuerdo con la Clínica Mayo esta afección, aqueja las arterias y los vasos sanguíneos, provocando accidentes cardiovasculares -en algunos casos-, porque “la sustancia cerosa” que se acumula en estos vasos sanguíneos impide el flujo de la sangre. Cabe destacar que, existe un colesterol bueno denominado HDL. Y en este caso, Tua Saúde afirma que las fibras de la mandarina también pueden reducir los niveles de esta sustancia e incluso evitan que se desarrolle una oxidación de las células asociadas con los lípidos.

También al consumo de mandarina se le atribuye su participación con la pérdida de peso, porque logra provocar un efecto llenura, evitando la ingesta de otros alimentos. Sugiere que es ideal dentro de un plan de alimentación balanceado que contrarreste la obesidad.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) “en 2016, más de 1900 millones de adultos de 18 o más años tenían sobrepeso, de los cuales, más de 650 millones eran obesos”, considerando que es un factor de riesgo para el desarrollo de algunas enfermedades.

La obesidad es un factor de riesgo para muchas enfermedades. | Foto: Getty Images

Y por supuesto, la cáscara de la mandarina, aunque es desechada, tiene más beneficios de lo que se espera. Un artículo publicado por Mejor con Salud, asegura que es rica en fenólicos, que son fundamentales para que el organismo funcione de manera correcta. Es de mencionar sus propiedades antioxidantes favorables para la salud.

¿Pero qué beneficios tiene el consumo de mandarina en ayunas?

Centro Pediatría explica que el consumo de mandarina en ayunas tiene muchos beneficios, como los ya descritos, es decir, que puede mejorar la digestión combatiendo trastornos digestivos. Sin embargo, no descarta la posibilidad que al ser cítrica provoque molestias en quienes tienen gastritis u otras enfermedades, por lo que sugiere consumirla después o dentro de una comida.

Además, si se desea consumir de noche, es importante tener en cuenta lo ya mencionado porque podría causar indigestión. De ahí que, sea importante antes de una ingesta regular consultar con un profesional de la salud.