Hacer ejercicio tiene importantes beneficios para la salud del corazón, el cuerpo y la mente, ya que previene la gestión de enfermedades no transmisibles, como las cardiovasculares, el cáncer y la diabetes, y reduce los síntomas de la depresión y la ansiedad, según la Organización Mundial de la Salud.

Por ello, las recomendaciones son tratar de hacer al menos 150 minutos de actividad aeróbica de moderada intensidad o 75 minutos de alta intensidad cada semana, o una combinación de ambos, pero hay que hacer esta cantidad de ejercicio durante varios días de la semana, porque eso es mejor que hacer todo en solo un par de días.

Es normal que después de unas semanas de inactividad, el cuerpo necesite adaptarse nuevamente al esfuerzo físico. | Foto: Getty Images

Ahora bien, retomar o comenzar, es una tarea difícil, pero afortunadamente existen recomendaciones para volver a practicar ejercicio luego de comer y descansar en vacaciones:

1. Encontrar la motivación: La motivación puede permitir que se retome el ejercicio, ya que existe un propósito, como, por ejemplo, adelgazar, dormir mejor, tener una mejor salud, entre otros.

2. Elegir una actividad física que motive: El ejercicio no debe ser aburridor, y tedioso, y por eso, es importante encontrar deportes que agraden, como nadar, montar bicicleta, correr, o ir al gimnasio y levantar pesas.

3. Empezar poco a poco: Aunque hay unos tiempos establecidos para hacer ejercicio, es importante comenzar gradualmente para evitar lesiones, fatiga, y pereza.

¿Cómo calentar antes de hacer ejercicio?

Hay que dedicar entre cinco y diez minutos al calentamiento, y algunas opciones para calentar antes de hacer ejercicio son:

1. Calentamiento aeróbico: Caminar, trotar suavemente, andar en bicicleta estática o nadar a un ritmo suave.

Retomar la rutina de ejercicio después de unas vacaciones no tiene por qué ser una tarea desalentadora. | Foto: Getty Images

2. Estiramientos dinámicos: Realizar zancadas, sentadillas, giros de cadera y movimientos de brazos.

3. Movimiento articular: Balancear las piernas de adelante hacia atrás y de un lado al lado; realizar círculo con los brazos hacia adelante y hacia atrás; mover los tobillos hacia adentro y hacia afuera; mover las muñecas hacia adentro y hacia afuera.

4. Calentamiento específico: Si el entrenamiento es con pesas, se pueden realizar repeticiones con un peso ligero, y si correrá, se puede trotar suavemente.

Ahora bien, las personas se preguntan cuál es la mejor hora para hacer ejercicio, y por ello, los expertos aseguran que es una cuestión de preferencia, gusto y horarios. Lo importante es cumplir los objetivos diarios.

De todos modos, varios entrenadores dijeron que ejecutar alguna actividad física en la noche reduce el estrés del día y por tal motivo mejora la calidad del sueño, ya que las personas se duermen más rápido y duran más tiempo en la etapa del sueño profundo, pero para otros entrenadores la mejor hora para entrenar es la mañana, por el hecho de que no existirán excusas porque es la primera actividad del día y no se podrá aplazar por imprevistos como mucho trabajo o cansancio.

La vuelta a la rutina no tiene que ser monótona. | Foto: Getty Images

La información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica y por ello, lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud.

Referencias