Para que las personas puedan mantener un buen estado de salud es necesario que lleven una dieta alimenticia que esté basada en diferentes tipos de nutrientes y minerales que son positivos para el organismo y que lo ayudan a estar preparado ante la presencia de cualquier anomalía o virus.

En este sentido, es de vital importancia el consumo de las vitaminas que componen las frutas y las verduras, o, es elección de los individuos si deciden comprar estos nutrientes en alguna farmacia e ingerirlo en su propio estado.

Sin embargo, el tema con las vitaminas y proteínas es de cuidado porque a pesar de que sí son beneficiosas para el cuerpo humano, un consumo desmedido de estas puede generar resultados negativos para la salud.

De igual manera, es necesario destacar que uno de los minerales principales que necesita el organismo es la vitamina D, cuya principal fuente son los rayos de sol que reciben las personas.

No obstante, una menor cantidad de este nutriente se puede encontrar en alimentos como el salmón, el atún, la caballa, la sardina, los moluscos, los crustáceos, la yema del huevo, la mantequilla, el hígado, el queso y los lácteos enteros.

Asimismo, si alguna persona quiere saber si le falta esta vitamina, el portal Hola Lifestyle menciona que los síntomas más comunes son fatiga y cansancio, pesimismo y un estado de ánimo deprimido, ligera excitabilidad, debilidad muscular, nerviosismo e insomnio, antojo de comer dulces, caries y gingivitis.

En esta línea, la falta de vitamina D también genera algunas enfermedades como, por ejemplo, las afecciones autoinmunes, diferentes tipos de cáncer, problemas metabólicos y enfermedades cardiovasculares que pueden terminar en la muerte.

Por otro lado, los expertos señalan que la carencia de esta vitamina también produce malestar y dolor, especialmente en los músculos; y también genera debilidad y dolor en los huesos

Por otro lado, los calambres musculares, suelen ser el primer síntoma de raquitisimo infantil, esto se da por una baja de calcio en la sangre, resultado de la carencia de vitamina D. También si las mujeres en estado de embarazo padecen de carencia de vitamina D, aumenta el riesgo de que el recién nacido presente espasmos.

En caso de que los bebés tengan falta de esta vitamina, podrían tardar más tiempo de lo habitual en sentarse y gateas. Por otro lado, sus fontanelas tardarán más en cerrarse. En el caso de los adultos, los huesos se pueden volver más débiles, especialmente los huesos de la columna vertebral, la pelvis y las piernas. En ocasiones pueden sentir dolor al tacto de las zonas afectadas.

Por ello, es importante que las personas que presenten un déficit de este nutriente se expongan al sol en las primeras horas de la mañana y consuman los alimentos mencionados anteriormente.

El superalimento que es rico en vitamina D

Son muy pocos los alimentos que contienen esta vitamina en forma natural, pero está presente en pescados grasos, como la trucha, el salmón, el atún y la caballa, así como los aceites de hígado de pescado.

De igual forma, un estudio de la revista científica Nutrición Hospitalaria reveló que el consumo de huevo podría prevenir la aparición de deficiencia de vitamina D.

De hecho, un solo huevo aporta seis gramos de proteína y 14 nutrientes esenciales, incluyendo vitaminas A, B, D y E, además de ser fuente de calcio, selenio y yodo. Por eso, se considera que los huevos son uno de los alimentos más nutritivos disponibles a nivel mundial, según los expertos del Centro Internacional del Huevo y la Nutrición (IENC).

Además, este alimento es uno de los más versátiles, ya que se pueden preparar de múltiples maneras, tanto como ingrediente para diferentes recetas como en forma de acompañamiento.