La trombocitopenia inmunitaria es un trastorno que puede provocar moretones y sangrado fácil o excesivo. Esto ocurre debido a que se presentan niveles bajos (inusuales) de plaquetas, que son las células encargadas de la coagulación de la sangre.
Además de causar moretones, también puede provocar puntos rojizos, los cuales pueden simular una erupción. Los niños, generalmente, se recuperan sin tratamiento; mientras que los adultos, pueden demorar más tiempo con la enfermedad.
Las causas de este trastorno pueden variar. “La trombocitopenia puede producirse a raíz de un trastorno de la médula ósea, como la leucemia o un problema del sistema inmunitario. O bien, puede ser un efecto secundario de ciertos medicamentos”, explica Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.
De acuerdo con esta entidad de salud puede que algunas personas que sufren de trombocitopenia inmunitaria no presenten síntomas. Cuando sí ocurren, suelen ser:
- Tendencia a la formación de hematomas y exceso de hematomas.
- Sangrado superficial en la piel, que aparece como manchas pequeñas de color rojizo púrpura (petequias) que parecen un sarpullido, generalmente en la parte inferior de las piernas.
- Sangrado de las encías o la nariz.
- Orina o heces con sangre.
- Flujo menstrual inusualmente abundante.
Respecto al tratamiento de esta enfermedad, depende de cómo se desarrolle en el paciente. En las personas que tienen trombocitopenia inmunitaria leve solo será necesario revisiones y controles de plaquetas periódicamente. Sin embargo, en algunos casos puede que la persona necesite de medicamentos para incrementar el recuento de plaquetas o cirugía para extirpar el bazo.
Trombocitemia esencial
Esta afección ocurre cuando hay una sobreproducción de plaquetas. Es importante iniciar un tratamiento oportuno, pues puede empeorar con el paso del tiempo. De acuerdo con Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, está dentro de la lista de trastornos mieloproliferativos. Otros de este mismo tipo incluyen:
- “Leucemia mielógena crónica (una sobreproducción de glóbulos blancos que inicia en la médula ósea)
- Policitemia vera (enfermedad de la médula ósea que produce un incremento anormal de glóbulos sanguíneos)
- Mielofibrosis primaria (trastorno de la médula ósea en el cual dicha médula es reemplazada por tejido cicatricial fibroso)”.
A continuación algunos de los síntomas que pueden presentar las personas que tienen trombocitemia esencial. En caso de identificarlos, se debe consultar inmediatamente a un médico para recibir la atención profesional adecuada.
- Dolor de cabeza (el más común).
- Hormigueo, entumecimiento o coloración azulada de manos y pies.
- Sentirse mareado o aturdido.
- Problemas de visión.
- Pequeños accidentes cerebrovasculares (accidente isquémico transitorio) o accidente cerebrovascular.
- Sangrado del tracto digestivo, el aparato respiratorio, las vías urinarias o la piel.
- Sangrado de las encías.
- Sangrado prolongado ocasionado por procedimientos quirúrgicos o por la extracción de un diente.
Para esta afección no hay una cura. El médico encargado del caso puede recetar medicamentos que ayuden a disminuir la cantidad de plaquetas en el organismo. “Si tienes una forma leve de esta enfermedad, es probable que no necesites tratamiento. Si tienes síntomas graves, es posible que necesites medicamentos que reduzcan el recuento de plaquetas, anticoagulantes o ambos”, explican los expertos de Mayo Clinic.
Esta enfermedad puede provocar complicaciones graves en el cuerpo humano, que pueden poner en riesgo la vida de las personas como un ataque cardíaco, un accidente cerebrovascular, problemas de la médula ósea y complicaciones en mujeres embarazadas. “La mayoría de las mujeres que sufren de trombocitemia esencial llevan adelante embarazos normales y saludables. Pero cuando no está controlada, la trombocitemia puede provocar un aborto espontáneo y otras complicaciones”, destaca la entidad sin ánimo de lucro.