El romero es una planta que se caracteriza por su sabor y aroma y por ello es muy utilizada como condimento. Sin embargo, también se le atribuyen propiedades medicinales que en la cultura popular han ganado espacio desde hace cientos de años.
“En su composición se encuentra un aceite esencial con borneol, pineno, alcanfor, canfeno y cineol, ácido rosmarínico, principios amargos, flavonoides y taninos. Esta composición hace que planta posea un altísimo potencial curativo que ha sido ampliamente desarrollado en la medicina popular”, precisa el portal Cuepo Mente.
En la lista de beneficios que se le atribuyen para mejorar la salud están, entre otros, que ayuda en el proceso digestivo, a aliviar el dolor de cabeza, favorecer el crecimiento del cabello y combatir el cansancio frecuente.
Esta planta, cuyo nombre científico es Rosmarinus officinalis, es rica en compuestos flavonoides, terpenos y ácidos fenólicos que le proporcionan sus propiedades antioxidantes, según información del portal de salud y bienestar Tua Saúde.
De acuerdo con el portal Salud Mapfre, de España, dentro de las propiedades farmacológicas que tiene esta planta está el efecto carminativo, que favorece la disminución de la generación de gases en el tubo digestivo y con ello se reducen las flatulencias y cólicos.
De igual forma, facilita la expulsión de la bilis retenida en la vesícula biliar; tiene un efecto diurético, antiinflamatorio, antiulcerogénico, antioxidante, antibactericida, antiséptico, fungicida y balsámico y se dice que es cicatrizante gracias a que aumenta el flujo de sangre en la zona localizada aliviando dolores de afectaciones osteomusculares.
Dentro de sus beneficios destaca que favorece la irrigación sanguínea en el cerebro, por lo que aliviaría sensaciones de vértigo y desequilibrio; así como inconvenientes de insuficiencia venosa, como flebitis, várices y hormigueos en pies y manos.
También ofrece bondades para el funcionamiento cerebral, siendo una ayuda para períodos de estrés como los que suelen presentarse antes y durante los exámenes, o antes y después de reuniones de trabajo muy importantes.
Según Cuerpo Mente, el consumo de romero favorece el sistema nervioso y contribuye a eliminar la jaqueca, si es de origen nervioso o digestivo y actúa también como tónico digestivo, que favorece la secreción de fluidos gástricos. “Gracias a estas propiedades, el romero es un buen recurso para devolver el apetito tras episodios de indisposición estomacal”, asegura el mencionado sitio web.
Antibiótico natural
Esta planta posee acción antibiótica, siendo recomendada contra bacterias como la Escherichia coli, Salmonella typhi, S. enteritidis y Shigella sonei, que causan infección urinaria, vómito y diarrea, precisa Tua Saúde.
De igual forma, se le reconoce por ser un buen diurético, por lo que el té elaborado con esta planta puede incluirse como parte de una dieta para bajar de peso y combatir la retención de líquidos en el cuerpo. Esta bebida aumenta la producción de orina, estimulando al organismo a eliminar las toxinas acumuladas.
Por otro lado, se dice que el romero podría mejorar el funcionamiento del hígado y disminuir el dolor de cabeza que surge después de haber comido en exceso, principalmente comidas con elevado contenido de grasas o bebidas alcohólicas. Sin embargo, no debe ser usado en caso se tengan enfermedades hepáticas sin consultarlo con el médico.
El consumo de esta planta aporta para mantener la diabetes bajo control, debido a que disminuye la glucosa y aumenta la insulina. Sin embargo, no se trata de un tratamiento médico y por ello no se debe excluir el uso de medicamentos recomendados por el médico, como tampoco la realización de una dieta adecuada, debiendo ser ingerido como complemento del tratamiento médico y nutricional.
Por último, ayuda a combatir la inflamación, aliviando el dolor, la hinchazón y el malestar. Es un remedio casero que se recomienda para combatir la inflamación en las rodillas, la tendinitis, e inclusive, la gastritis, que es la inflamación del estómago..
Si bien se trata de un producto natural, siempre es mejor consultar con el especialista sobre su ingesta regular, pues sus efectos en el organismo dependerán de la condición del paciente y los tratamientos médicos.