La cetosis es un proceso natural del organismo que tiene como objetivo la producción de energía a partir de grasa y no de glucosa, como normalmente lo hace.
Este proceso se da cuando en el cuerpo no hay una cantidad suficiente de azúcar, y puede producirse debido a períodos de ayuno o como consecuencia de una dieta restrictiva y pobre en carbohidratos, que es el principio de la dieta keto.
“Ante la falta de glucosa, que es la fuente de energía principal del organismo, el cuerpo comienza a producir cuerpos cetónicos como fuente de energía, que son el resultado de la destrucción de las células de grasa”, explica el portal Tua Saúde.
Estos cuerpos cetónicos son transportados hacia el cerebro y los músculos, permitiendo el buen funcionamiento del organismo. La cetosis se ha popularizado con el auge de las dietas keto, o cetogénicas, promocionadas como el nuevo método para adelgazar.
El portal Diet Doctor indica que en periodo de cetosis el cuerpo produce cetonas a un ritmo acelerado. “En realidad el hígado produce cetonas de forma regular, incluso si se sigue una alimentación alta en carbohidratos”, precisa. Sin embargo, cuando los niveles de glucosa e insulina disminuyen con una dieta con restricción de carbohidratos, el hígado aumenta la producción de cetonas para proporcionar energía al cerebro.
Si bien entrar en proceso de cetosis es algo que depende de cada persona y está muy relacionado con el metabolismo de cada quién, existen trucos que pueden ayudar a lograrlo de manera más rápida.
Reducir los carbohidratos
La primera fórmula para entrar en cetosis es la reducción drástica de los carbohidratos, principio en el cual se basa la dieta keto. El portal Health Insider asegura que para lograr este objetivo, la persona debe mantener la ingesta de carbohidratos por debajo de 20-25 gramos por día.
Las proteínas son clave
Es importante consumir suficiente proteína para suministrarle al hígado los aminoácidos que se pueden usar para la producción de glucosa. El cuerpo los necesita para mantener una salud normal, producir hormonas, tejido muscular y neurotransmisores.
Lo ideal, según los expertos, es consumir 1,3 gramos de proteína por kilo de peso corporal. La ingesta de proteínas debe ser lo suficientemente alta para mantener la masa muscular cuando la ingesta de carbohidratos es baja, especialmente si la persona está perdiendo peso.
Ayunos
Otra forma de entrar en cetosis es pasar varias horas sin comer. De hecho, muchas personas entran en cetosis leve entre la cena y el desayuno. Comer en un período de tiempo limitado tiene un efecto significativo en las reservas de glucógeno. El ayuno obliga a agotar rápidamente las reservas de azúcar en el cuerpo, provocando que ésta deba recurrir a descomponer la grasa para generar la energía.
Grasas saludables
Elegir grasas saludables como pescados azules, aguacate, aceite de oliva virgen extra, aceitunas bajas en sodio, aceite de coco, frutos secos como nueces, almendras, cacahuetes y semillas, es clave cuando se quiere bajar de peso o quemar grasa activando el proceso de cetosis.
El tiempo que una persona tarde en entrar en cetosis depende de cada organismo. La cantidad de glucógeno suele ser suficiente para pasar uno o dos días sin comer, pero esto dependerá de cuánta energía se necesita a lo largo del día. Además, no todas las personas tienen la misma cantidad de glucógeno. Se estima que por cada kilogramo de peso corporal corresponden entre 6 y 7 gramos de este polisacárido.
Es importante, según los expertos, tener claro que entrar en cetosis implica un cambio metabólico y eso puede tardar fácilmente entre dos y tres días, aun cuando se haga actividad física o se siga una dieta keto de manera correcta.
Según Tua Saúde, si bien la cetosis es un proceso normal del cuerpo que genera energía y el cual puede ayudar en la pérdida de grasa, es importante que haya un control de la cantidad de cuerpos cetónicos en la sangre, ya que cuando las concentraciones son muy elevadas, la sangre puede puede volverse muy ácida y conducir a un coma, por ejemplo. De esta forma, se recomienda que el ayuno y las dietas restrictivas se realicen bajo la orientación médica o de un nutricionista.