El abuelo de los niños indígena rescatados, Lesly (13 años), Soleiny (9 años), Tien (4 años) y Cristin (1 año), reveló que los menores “sobrevivieron al comer fariña y después que se les acabó empezaron a comer pepas”.
Ahora bien, es importante señalar que la fariña es una harina que se elabora a partir de la yuca amarga o yuca brava, y es un alimento que, según Pulzo basado en el portal Mejor con Salud, tiene un alto valor nutricional, pues se caracteriza por tener un alto contenido de vitaminas del grupo B, carbohidratos y calorías.
De hecho, según Mejor con Salud, este es el valor nutricional por 100 gramos de fariña:
- “Carbohidratos: 73,2 gramos.
- Fibra: 4,2 gramos.
- Proteína: 11,60 gramos.
- Sodio: 124 miligramos.
- Agua: 11,08 gramos.
- Calorías: 360.
- Grasa: 1,41 gramos.
- Vitamina B3: 13,7 miligramos.
- Vitamina B9: 121 miligramos.
- Vitamina B1: 1,00 miligramos”.
Además, hay que destacar que este alimento es consumido tradicionalmente por los pueblos indígenas del Amazonas.
¿Qué sigue con los cuatro niños indígenas rescatados?
La directora del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, Astrid Cáceres, habló el sábado desde el Hospital Militar, centro en el que son atendidos los cuatro niños indígenas que fueron rescatados en las selvas del Guaviare luego de deambular durante 40 días tras el accidente de la avioneta en la que se transportaban junto a sus familiares.
La funcionaria se refirió al estado de salud de los menores y aseguró que, aunque están débiles, se les ha podido ver activos luego de que fueran trasladados a este centro médico en el que han recibido atención especializada para saber el estado real en el que se encuentran.
“Están débiles, tienen sus momentos, pero esta mañana los encontramos juguetones después de acompañarlos hasta la madrugada y luego de volver a las siete están juguetones”, dijo Cáceres a los medios de comunicación.
Asimismo, señaló que por ahora están a la espera de algunos resultados de exámenes médicos para continuar con el proceso de recuperación que se tiene previsto y en el que planea suministrarles a los menores indígenas los alimentos a los cuales están acostumbrados con el fin de contribuir a su pronta recuperación.
“El paso a seguir es que tenemos una ruta con la Opiac (...) Cuando les dejen tener alimentación, tenemos la alimentación que más les gusta de acuerdo a su cultura, lista y preparada”, indicó la directora del ICBF, quien además señaló que ya contactaron personal capacitado y experto en la preparación de los platos específicos que consumen estos niños.
Cáceres también reveló que dentro de los planes a seguir con estos menores está la celebración de su cumpleaños, esto con el fin de realizar actividades que les ayuden a despejarse después de las duras condiciones que tuvieron que sortear los cuatro hermanos para mantenerse con vida en medio de la espesa selva colombiana.
Dos de los niños cumplieron años al estar perdidos
En medio de la complicada odisea, dos de los niños habían cumplido años en la selva; una de ellas fue Cristin, quien pasó su primer año en la lucha por sobrevivir, mientras que su hermano Tien Noriel cumplió cinco años.
El papel de Lesly, la hermana mayor, fue elogiado por el ministro de Defensa, Iván Velásquez. “Tenemos que reconocerle no solo su valor, sino su liderazgo. Fue por ella que los tres hermanitos pudieron sobrevivir a su lado. Con sus cuidados, con el conocimiento de la selva”, expresó.
Los cuatro hermanos llegaron a Bogotá en la medianoche del sábado 10 de junio, para ser atendidos en el Hospital Militar. Asimismo, permanecerán hospitalizados entre dos o tres semanas, todo dependiendo de ese proceso de realimentación.