La mastectomía es un procedimiento para remover por completo la glándula mamaria. En general, quienes se someten a esta cirugía son mujeres afectadas por un carcinoma ductual in situ, que es la forma de cáncer de seno más común. Pero también aquellas mujeres con riesgo, que quieren evitar el desarrollo de un tumor en el pecho.Hay diferentes tipos de mastectomía: la total, radical modificada, radical, parcial y subcutánea que preserva el pezón. Todos estos son procedimientos confiables, pero en ocasiones pueden presentar problemas porque, como explica el mastólogo Sebastián Quintero, durante la cirugía se pueden cortar algunos nervios que le dan la sensibilidad a la piel o a la mama. Esto genera traumas y dolores que en algunas pacientes pueden ser agudos, que pasan luego del tiempo de recuperación y en otras, se puede convertir en un dolor crónico.Puede leer: ¿La doble mastectomía es inútil?Cuando lo anterior se presenta, ese dolor puede ser incluso limitante en cuanto al movimiento. “Muchas pacientes tienen dificultad para mover el hombro. El dolor puede ser tan severo, que se llama ‘hombro congelado‘, una especie de artrosis donde el brazo pierde su funcionalidad”, cuenta el mastólogo. Otro efecto que se puede presentar es el linfedema, que ocurre cuando el brazo no puede hacer drenaje y se inflama.Otra situación que puede aparecer es el llamado “síndrome de posmastectomía”, que ocurre entre el 60% y el 70 % de los casos. El problema con este síndrome es que no es diagnosticado porque tanto las pacientes como muchos profesionales creen que son efectos normales. “Este dolor tiene que ver con los nervios que succionamos, especialmente en procedimientos axilares, como el nervio intercostohumeral y el de la cara interna del brazo, que puede causar hormigueo o dolor aumentado”, explica Quintero.Le puede interesar: El efecto Angelina JolieTambién es posible que se presente dolor intenso cuando se hacen drenajes. “No está muy claro, pero se piensa que forman granulomas que pueden generar un dolor puntual en ese sitio”, explica el mastólogo. En ocasiones, muchos de estos dolores tienen un componente emocional, como explica Quintero, “se puede presentar un estrés postraumático luego de pasar por una cirugía que se puede considerar mutilante y un diagnóstico difícil”. Otro de los efectos neuropáticos es el llamado “síndrome del miembro fantasma”, en el cual terminan sintiendo el seno en donde lo tenían y sienten dolor.Todos estos efectos deben ser tratados de manera integral por un grupo interdisciplinario, pues se ha demostrado que tratamientos como la terapia física ayudan a una recuperación más fácil, a mejorar el dolor y la movilidad. También se necesita la intervención de terapias de tipo psicológico para manejar los efectos emocionales que conlleva una mastectomía, y el continuo acompañamiento del cirujano y oncólogo.Le sugerimos: ¿Por qué las mujeres con cáncer de seno optan por no tratarse?Hay que tener en cuenta que cuando se presenta uno de estos problemas, se debe acudir de inmediato al médico para lograr un diagnóstico oportuno para empezar con el manejo de estos síntomas. Los tratamientos para controlar estos dolores, generalmente, se centran en administrar analgésicos. Después, dependiendo de la evolución del dolor, se pueden aplicar medicamentos más fuertes como los derivados de la morfina.