El aporte de las vitaminas al cuerpo humano es clave para poder estimular el desarrollo de las capacidades de cada individuo, estas permiten fortalecer distintos elementos presentes en la salud, por lo que en caso de presentarse un déficit en el consumo de las mismas, algunas funciones del organismo se pueden ver altamente afectadas.
La ingesta de estos elementos se puede dar a través de la alimentación, siempre y cuando esta se presente de manera rica y balanceada, incluyendo una gran variedad de grupos alimenticios, sin embargo, este déficit también puede ser combatido a través del uso de suplementos, los cuales pueden incluir una o más vitaminas en su composición.
A pesar de esto, es importante considerar los distintos efectos que se pueden presentar para la salud ante la falta de estos elementos, ya que en ciertos casos, muchas personas pueden poseer esta ausencia de vitaminas, sin embargo, lo desconocen.
Ante este tipo de situaciones, cabe aclarar que los efectos se pueden presentar de manera variada e integra, sin embargo, los mismos varían de acuerdo al grupo vitamínico que muestre esta falta dentro de las sustancias presentes en el organismo.
Las funciones que posee cada vitamina para el cuerpo humano, pueden variar ampliamente, sin embargo, el complejo B, es uno de los más populares e importantes para el cuerpo humano, gracias a la gran variedad de beneficios que pueden presentar para el desarrollo del mismo.
En caso de presentarse una disminución en los niveles de los distintos grupos pertenecientes a este concepto, las dificultades pueden ser amplias e integras, sin embargo, muchas de estas se pueden presentar en la rama digestiva del organismo.
En el caso puntual de que se presenten náuseas, vómitos, diarrea u otros desordenes digestivos, se puede ver relacionado de manera concreta a la falta de vitamina B12, ya que ante la ausencia de este elemento en el organismo, se pueden presentar estos daños de forma paulatina y progresiva.
Según explica el portal, Berocca, parte de los alimentos que poseen grandes aportes a la vitamina B12, son las carnes rojas, como por ejemplo, el cerdo o el cordero; el pescado, resaltando de manera concreta el salmón o el atún; o también los lácteos, ya se trate del queso, el yogurt, o el consumo de leche de manera adecuada.
Cabe mencionar que el consumo de estos elementos debe ser de manera medida, ya que en caso de que la ingesta sea excesiva, se puede presentar una anomalía reconocida como la hipervitaminosis, la cual muestra los mismos síntomas o signos que el déficit de la misma.
De la misma forma, es importante estar atento a otros elementos, como por ejemplo, la aparición de úlceras en la boca, la piel pálida o amarilla, el hormigueo en distintas parte del cuerpo humano, o cambios constantes en la frecuencia cardíaca.
Teniendo en cuenta estas afectaciones integras y generales que se pueden presentar, es clave que no se subestime la importancia de las vitaminas para la salud, y para el funcionamiento del organismo, ya sea durante la niñez, la adolescencia o incluso la adultez, para así generar hábitos de vida saludable, los cuales prevengan enfermedades o daños profundos al organismo con el aumento de la edad.
Ante este tipo de situaciones, o en caso de que los síntomas mencionados persistan incluso aumentando la cantidad de consumo los alimentos previamente nombrados, o incurriendo al uso de suplementos, se recomienda visitar a un médico, el cual pueda analizar más a fondo estas afectaciones, con el fin de diagnosticarlas de manera más profundas, y así tratarlas en la brevedad de lo posible.