Un ataque al corazón ocurre cuando se presenta una obstrucción de la sangre al órgano y, si no se restablece con anticipación, el músculo empieza a cesar en sus funciones y ocasionar la muerte. Es por eso que hay un protocolo para seguir en caso de que alguien cercano tenga un ataque de estos, el cual se debe poner en marcha en poco tiempo mientras llega el personal de salud.

Con base en la información de Medline Plus, un ataque cardiaco es considerado una emergencia, por lo que contactar al servicio médico es el primer paso para gestionar la situación. Una persona promedio espera máximo tres horas para buscar ayuda, por lo que el riesgo de fallecer es alto si no llega con anterioridad al hospital. Es por eso que tener conocimientos de primeros auxilios es vital. Los pasos para llevar a cabo son los siguientes.

La falla cardiaca ocurre cuando los vasos sanguíneos que conectan con el corazón no funcionan correctamente. | Foto: GettyImages

En primer lugar, hay que intentar que la persona afectada se siente, para que descanse y procure mantener la calma. Luego hay que aflojar sus vestimentas, para que ninguna esté ajustada e impida el flujo sanguíneo.

En caso de que el paciente consuma medicamentos para el dolor torácico (nitroglicerina), es vital que los ingiera en ese momento. Si el dolor no desaparece o se intensifica, hay que insistir para que el servicio médico se apresure.

Una de las situaciones que puede ocurrir es que, dada la gravedad del momento, el paciente puede perder la conciencia y desmayarse. En esos casos hay que iniciar un RCP (reanimación cardiopulmonar).

Por nada se puede dejar sola a la persona, en especial si los síntomas no desaparecen por naturaleza. Además, tampoco se puede ofrecer ayuda oral (reanimación por la boca), salvo que esa sea la recomendación de un especialista de la salud.

Reanimación cardiovascular (RCP). Getty Images. | Foto: Getty Images

Para realizar una reanimación cardiovascular, hay que tener en cuenta que hay tres tipos de personas para hacerlas, dependiendo de la capacitación que se tenga. Esto es importante para saber qué hacer. La Asociación Americana del Corazón las distingue de esta forma:

Persona sin capacitación: Hay que hacer compresiones ininterrumpidas en el pecho, entre 100 y 120 por minuto, hasta que acudan los paramédicos. Sin embargo, lo mejor es llamar al servicio médico y tomar las recomendaciones mencionadas anteriormente.

Persona capacitada: Si hay una experiencia en este tipo de situaciones, se comprueba el pulso y la respiración. En caso de que durante 10 segundos no se siente ninguno de los dos, hay que empezar con las compresiones, intercaladas con 30 compresiones y dos respiraciones de rescate.

Persona con capacitación, pero sin práctica: Puede que se haya hecho el curso respectivo, pero sin la experiencia de ponerlos en marcha. Para estos casos, hay que limitarse a hacer entre 100 y 120 compresiones por minuto.

Medline Plus también indica que los expertos sugieren que en esos casos se puede tomar una dosis completa. Sin embargo, hay que tener en conocimiento las alergias del paciente, dado que hay algunos que no pueden ingerir este medicamento.

Por su parte, Mayo Clinic explica que los síntomas de un infarto son:

• Dolor u opresión en el pecho o específicamente en el centro del pecho.

• Dolor o molestias que se expanden al hombro o brazo, espalda, cuello, mandíbula, dientes o la parte superior del abdomen.

• Náuseas.

• Indigestión o acidez estomacal.

• Dolor abdominal.

• Sudoración.

• Aturdimiento.

Fumar, uno de los varios factores que aumentan la probabilidad de tener una falla cardiaca. | Foto: Peter Dazeley

En condiciones normales, una falla cardiaca se presenta con el dolor de pecho prolongado durante 15 minutos. Dependiendo del modo que ocurra, la afectación será leve o intensa. Hay personas que, por edad o factores hereditarios, son propensos a sufrir estos casos.

También se pueden prevenir con las siguientes acciones, según recomendaciones del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS):

• Incrementar el consumo de pescado, ya que es un cardioprotector.

• Aumentar el consumo de frutas y verduras.

• Reducir el consumo de alimentos ricos en grasas de origen animal, pues elevan los niveles de colesterol en la sangre.

• Evitar fumar.

• Realizar ejercicio de manera constante.