Dormir es una de las acciones más reparadoras y placenteras para el cuerpo. Sin embargo, las altas temperaturas pueden interferir en el sueño y hacer que sea más difícil conciliar el descanso. Las largas jornadas de trabajo o actividades diarias también son culpables de que no se logre alcanzar el sueño, porque provocan una activación del metabolismo y hace que las personas se mantengan activas.
No dormir como se debe puede generar insomnio, uno de los trastornos del sueño más frecuentes entre las personas. Según Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, existe el insomnio agudo, el cual suele durar días o pocas semanas derivado de un momento de estrés, presiones familiares o eventos traumáticos.
“La mayoría de las personas tienen insomnio ocasionalmente. Sin embargo, el insomnio crónico (que dura al menos 3 noches por semana durante más de un mes) puede desencadenar graves problemas durante el día, como agotamiento, irritabilidad y dificultad para concentrarse”, señala Medline Plus.
¿Cómo dormir cuando hace mucho calor?
Expertos del portal Urgente24 reveló algunas maneras en las que es posible conciliar el sueño y dormir profundamente aún cuando hace un calor infernal:
- Tener una rutina es una de las mejores maneras para lograr descansar bien. Despertarse y acostarse a la misma hora puede ayudar, “pero no más de 8 horas antes de lo previsto para comenzar el día”, según el medio citado.
- El uso de un ventilador, incluso ante la presencia del aire acondicionado, ya que permite que en el ambiente circule aire para ayudar a mantener fresco el lugar.
- La hidratación durante el día y antes de dormir es importante especialmente cuando las altas temperaturas llegan, ya que ayudan a reducir el riesgo de sufrir un golpe de calor y puede ayudar a dormir mejor.
- Cerrar las ventanas durante el día y abrirlas en la noche, al igual que las cortinas ayudan a mantener fresco el ambiente.
- No perder la calma ante las altas temperaturas es importante; “realizar una actividad relajante, no estimulante, sin aparatos, como leer o meditar antes de volver a la cama y volver a intentarlo”, según Colin Espie, experto en sueño, en el sitio Eat This, Not That.