La vaginitis es una de las infecciones más comunes que surgen en el órgano reproductor femenino. La mayoría de las veces, este padecimiento se genera cuando hay un cambio en el equilibrio de las bacterias vaginales o una afección, según explica Mayo Clinic: “La reducción de los niveles de estrógeno después de la menopausia y algunos trastornos de la piel también pueden causar vaginitis”.
Tipos de vaginitis
- Vaginosis bacteriana: esta se produce por la presencia excesiva de bacterias en la zona; estos compuestos se encuentran naturalmente en la zona, pero en cantidades desmedidas alteran el equilibrio natural de la zona íntima.
- Candidiasis vaginal: esta afección aparece ante la presencia de un hongo que se produce naturalmente en la zona.
- Vaginitis gonocócica: esta puede producir sangrado después de mantener relaciones sexuales o en el flujo vaginal.
- Tricomoniasis: esta se produce ante la presencia de un parásito que, por lo general, se trasmite por medio de una relación sexual.
Síntomas de la vaginitis
- Cambio de color, olor o cantidad del flujo vaginal.
- Picazón o irritación vaginal.
- Dolor durante las relaciones sexuales.
- Micción dolorosa.
- Sangrado o manchado vaginal leve.
El color de las secreciones podría determinar que tipo de vaginitis se tiene.
- Vaginosis bacteriana: por lo general, cuando se padece de este tipo de vaginitis, el flujo se torna de un color blanco, en algunos casos grisáceo y tiene un olor desagradable. Las pacientes describen el olor como al del pescado y se puede hacer más notorio luego de haber tenido relaciones sexuales.
- Candidiasis vaginal: esta patología solo genera una incómoda picazón, pero cuando presenta secreciones son de color blanco y espesa.
- Tricomoniasis: la secreción de este padecimiento es amarillo verdoso y en algunas ocasiones es espumosa.
Mujer sufre de infección vaginal. | Foto: Getty Images
Tratamiento
- Este dependerá de la causa, pero por lo general se recetan medicamentos, geles o antimicrobianos que se introducen en la zona vaginal. Cuando la enfermedad se da por una baja de estrógenos, se formulan una crema que los contenga.
- En algunas pacientes el tratamiento debe continuar, pese a que los síntomas ya hayan desaparecido, pues pueden tener una condición que genera esta patología de manera constante; sin embargo, eso solamente lo puede determinar un especialista de la salud, en este caso un ginecólogo.
Prevención
- Tener una buena higiene en la zona.
- Evitar los baños en bañeras y jacuzzis de uso público.
- Evitar productor que irriten la zona como: tampones, pañitos húmedos perfumados, jabones perfumados.
- Luego del baño se recomienda enjuagar el jabón que se usa y secar muy bien la zona genital para prevenir irritaciones.
- No emplear jabones agresivos y evitar baños de espuma.
No olvidar
- Evitar lavados vaginales: la zona íntima no requiere de más limpieza que bañarse a diario. “Los lavados vaginales frecuentes perturban a los microorganismos beneficiosos que viven en la vagina y pueden aumentar el riesgo de infección vaginal. Los lavados vaginales no harán desaparecer una infección vaginal”.
- Mantener relaciones sexuales de manera segura: utilizar condón y limitar el número de parejas sexuales puede prevenir estas enfermedades.
- Usar ropa interior de algodón: “Las levaduras proliferan en ambientes húmedos”.