Los riñones son órganos determinantes para el normal funcionamiento del organismo. Cumplen funciones clave, como filtrar y mantener la sangre libre de productos de desecho provenientes de los alimentos.
De igual forma, se encargan, según el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales de Estados Unidos, de eliminar el ácido que producen las células del cuerpo y mantienen un equilibrio saludable de agua, sales y minerales tales como sodio, calcio, fósforo y potasio en la sangre.
La Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos explica que dentro de cada riñón hay un millón de estructuras pequeñas llamadas nefrones, los cuales filtran los desechos y el exceso de agua de la sangre, lo que se vuelve orina.
“La mayoría de las enfermedades renales atacan los nefrones. Este daño causa que los riñones no puedan eliminar desechos. Las causas incluyen problemas genéticos, lesiones o medicamentos”, precia la mencionada fuente.
Para cuidar estos órganos, es importante comer productos bajos en grasa y sal; beber mucho líquido, reducir el consumo de alimentos procesados y eliminar la sal de la dieta, al igual que el dulce y el alcohol. Algunas frutas resultan de utilidad cuando de cuidar estos órganos se trata. Una de ellas es la uva.
Función diurética
De acuerdo con el portal de estilo de vida unCOMO, las uvas moradas constituyen una alternativa efectiva para ayudar en la limpieza de los riñones. Destacan sus propiedades antioxidantes y desintoxicantes, las cuales favorecen la función renal de eliminar toxinas y deshacerse de las sustancias nocivas para el cuerpo.
En esta línea, el portal Cuerpo Mente, asegura que este fruto es rico en potasio y ácidos orgánicos que estimulan los riñones facilitando su acción diurética y la eliminación de sustancias de desecho, como el ácido úrico. Además de contener un 80 % de agua, calcio y otros elementos alcalinos que potencian sus efectos diuréticos.
“Las uvas poseen un efecto diurético beneficioso en caso de hiperuricemia o gota y litiasis renal, gracias a que favorece la eliminación de ácido úrico y sus sales”, precisa el porta Saber Vivir, de España. De igual forma, previene la hipertensión arterial y otras enfermedades asociadas a retención de líquidos. Así mismo, su alto contenido en pectina ayuda en la eliminación de sustancias que son nocivas para el organismo.
Otras frutas saludables para el riñón
Además de las uvas, otras frutas saludables para los riñones son la sandía, la piña y los arándanos.
- Sandía: Esta fruta contiene importantes cantidades de agua, lo que le atribuye propiedades depurativas y diuréticas que ayudan a desintoxicar y limpiar diferentes órganos del cuerpo, como es el caso de los riñones. También es benéfica para la función renal y el flujo sanguíneo, de acuerdo información del portal Gastrolab, de México. Es rica en antioxidantes, protectores de algunas sustancias tóxicas que afectan al riñón.
- Piña: Es fuente de vitamina C, agua, potasio y bromelina, que es su principal componente. Ofrece beneficios depurativos, por lo que es una buena opción para cuidar la salud de los riñones, evitando la formación de cálculos renales. La bromelina también actúa como antiinflamatorio natural, ayudando a aliviar molestias de procesos inflamatorios, precisa el portal de bienestar y salud Tua Saúde.
- Arándanos: Estos frutos aportan antioxidantes que ayudan a sacar desechos y a que el cuerpo se deshaga de los radicales libres. “Sus propiedades fortalecen el buen funcionamiento de los riñones y previenen infecciones, evitando que las bacterias se queden en las paredes del sistema gastrointestinal”, asegura el portal Come Fruta, de España.
Recomendaciones para cuidar los riñones
Los especialistas aseguran que para mantener sanos los riñones lo primero que se debe hacer es controlar las enfermedades que tienen incidencia directa sobre estos como la diabetes y la presión arterial alta.
Para hacerle frente a estos padecimientos es importante consumir alimentos saludables como frutas frescas y vegetales frescos o congelados, granos enteros y derivados lácteos semidescremados o descremados. Es clave disminuir la sal y la ingesta de alimentos con azúcar añadido.