Un reciente informe de la revista Lancent encontró que ciertos factores en el estilo de vida podría retrasar o prevenir un tercio de los casos de demencia en todo el mundo.
Entre ellos se incluyó la alimentación, destacando que una dieta rica en verduras de hoja verde, cereales integrales, pescado y aves ayudaba a reducir las probabilidades de deterioro cognitivo.
Alimentos propios de una dieta conocida como MIND, abreviatura de “Intervención Mediterranea-DASH para el retraso neurodegenerativo” y que entremezcla las dietas mediterránea y DASH.
Un estudio centrado en casi 1.000 personas de edad avanzada encontró que esta dieta parecía reducir el riesgo de Alzheimer en un 35 % en aquellos que la siguieron moderadamente y en un 53 % en las personas que lo siguieron más ampliamente.
Ahora bien, frente a los alimentos que favorecen la salud cerebral, existen otros, en cambio, que pueden incrementar los riesgos de deterioro cognitivo.
A este respecto el portal Eat This consultó con las doctoras Christine Bishara y Amber O’Brien sobre qué alimentos presentan el mayor riesgo de Alzheimer.
Alimentos que no puede comer una persona con alzhéimer
Los cereales azucarados
- Según Bishara existe cierta relación entre el estómago y el cerebro que puede conducir al desarrollo de la enfermedad de Alzheimer.
- “La disminución de la diversidad intestinal y el aumento de la inflamación, creemos que tienen vínculos importantes con el desarrollo de la demencia de Alzheimer”, afirma.
- Y uno de los alimentos que más contribuye a este tipo de inflamación son los cereales azucarados.
- Los cereales azucarados, especialmente los no orgánicos, tienen glifosato, un pesticida común que se rocía en los cultivos de maíz. De hecho, se ha demostrado que produce una alteración en el microbioma intestinal, según afirma Bishara.
Las bebidas light
- “Los refrescos dietéticos con todos sus edulcorantes artificiales también alteran el intestino y disminuyen su diversidad. La única excepción es la stevia, que es un edulcorante natural, pero aun así lo limitaría, ya que no conocemos los efectos a largo plazo y los estudios sobre ella”, reconoce Bishara.
- Por otro lado, como ha demostrado la ciencia, una ingesta excesiva de bebidas azucaradas aumenta las probabilidades de desarrollar diabetes tipo 2, lo que a su vez dispara las posibilidades de padecer Alzheimer.
El exceso de carbohidratos
- “Las personas que consumen en exceso alimentos con almidón, como pan, pasta y arroz también tienen un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer”, señala O’Brien.
- Una investigación centrada en personas mayores descubrió que aquellas que consumían más del 58 % de sus calorías diarias en forma de carbohidratos tenían casi el doble de posibilidades de padecer deterioro mental leve y demencia.
- Los carbohidratos simples al ser procesados pierden su fibra y otros nutrientes mientras que solo queda en ellos el almidón. Una forma más saludable de comer estos alimentos es optar por la versión integral de pan, pastas y arroces.
La pastelería industrial
- Los alimentos ultraprocesados, y en concreto la cantidad de azúcares añadidos que conllevan, son uno de los alimentos que más puede poner en peligro la salud cerebrovascular.
- “Cualquier dulce envasado con ingredientes añadidos como jarabe de maíz con alto contenido de fructosa, aceites hidrogenados o azúcar como primer ingrediente contribuyen a un mayor riesgo de Alzheimer”, afirma Bishara.
- Además, estos productos también favorecen la inflamación intestinal, por lo que mejor desterrarlos de tu dieta cuanto antes.
- En esta línea, un estudio de 2015 realizado sobre estudiantes universitarios sanos encontró que aquellos que realizaban una mayor ingesta de grasas y azúcar refinada tenían peor memoria.