El embarazo, para algunas mujeres, es uno de los momentos más significativos de la vida. Es una etapa en la que se aprende y se comenten algunos errores, ya que nadie sabe con exactitud cómo manejar su propio embarazo.
Además, existen varios mitos alrededor de este tema y también hay varios profesionales de salud desactualizados.
De acuerdo con Mayo Clinic, entre los cambios y síntomas que vive una mujer durante su etapa de embarazo, está:
- Náuseas y vómito.
- Cese de la menstruación.
- Orinar con frecuencia.
- Cansancio y fatiga.
- Calambres.
- Estreñimiento.
- Cambios de humor.
- Congestión nasal.
Aunque nadie está exento de intoxicarse luego de comer un alimento no muy bien cocinado, o mal lavado, una mujer en estado de embarazo se encuentra en mayores probabilidades de esto, por lo que es importante lavar muy bien cada uno de los alimentos, sean frutas, verduras y hasta carnes.
Los huevos deben estar muy bien cocidos, por lo que si hay preparaciones en las que se deben comer medio crudos, se recomienda no hacerlo para evitar cualquier tipo de infección.
Los productos lácteos que tengan leche no pasteurizada no son recomendados porque, al igual que otros alimentos, pueden ser factores para enfermedades transmitidas.
El café es una de las bebidas preferidas alrededor del mundo, siendo uno de los mejores acompañamientos en los desayunos, entre comidas, y en las comidas. Sin embargo, la entidad americana aseguró que un consumo de más de cuatro tazas al día es perjudicial para la salud, ya que la cafeína es una sustancia que actúa sobre el sistema nervioso de una persona, provocando en ella nerviosismo, taquicardia, entre otros signos.
Por lo anterior, se aconseja que una mujer embarazada consulte con un médico la clase de café y qué medida podría consumir, o quizá, evitar.
Restringir el consumo de bebidas alcohólicas, que en una alta ingesta son dañinas para la salud, pues no hacerlo tiende a traer más riesgos cuando una mujer está en estado de embarazo, provocando, en algunos casos, abortos espontáneos o hasta deformidades en el feto.
El consumo de proteína y de pescados puede ser incluido en una dieta ideal durante el embarazo; sin embargo, los mariscos, por ejemplo, tienen mercurio, que pueden ser dañinos para el bebé, por lo que el marlín, el blanquillo, la caballa gigante, entre otros, no son sugeridos para consumir.
Consejos que se pueden llevar a cabo durante el parto
El trabajo de parto es el momento en el cual el cuerpo comienza a prepararse para que el bebé nazca, utilizando en algunos casos la intervención de analgesia epidural para disminuir el dolor. Este momento supone el final del embarazo y ocurre, normalmente, entre la semana 37 y la 40 de gestación.
Consiste en la dilatación del cuello del útero hasta los diez centímetros, momento en que el cuerpo está preparado para permitir que el bebé atraviese el canal de parto y salga al exterior. Por naturaleza, el cuerpo empieza a trabajar mediante contracciones que varían según su intensidad y fase del parto.
Son varios los cambios que se generan durante el embarazo y el trabajo de parto; en la medida en que se está mejor para asumir ese feliz momento del nacimiento, los dolores e incomodidades van a ser menores.
- Mantenerse en forma
Hacer ejercicio con regularidad ayuda en gran medida a tener partos más cortos. Caminar, nadar o hacer pilates suelen ser buenas alternativas para favorecer la flexibilidad y evitar molestias como la hinchazón, el dolor de espalda o el insomnio.
Si la paciente no puede practicar deporte o actividad física, por alguna condición o recomendación médica, se recomienda caminar durante 30 minutos al día para favorecer la circulación.
- Acudir a las clases de educación maternal
Los cursos psicoprofilácticos ayudan a disminuir la ansiedad y el miedo del día del parto. Además, permiten que la paciente esté y se sienta más preparada, puesto que se pueden anticipar los distintos cambios que ocurren a lo largo de la gestación y conocer lo que ocurrirá en las diferentes etapas del parto.
- Distraer la mente durante el trabajo de parto
Leer un libro, escuchar música o un ordenador portátil para distraerse durante las horas del trabajo de parto puede ser una buena opción. Si se va a ser mamá por primera vez, lo más probable es que se esté más horas en trabajo de parto, por lo que puede ayudar poner la mente en otro lado y no estar angustiada por la cantidad de tiempo que se lleva en este proceso.