Según explica la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, la enfermedad cardiovascular está relacionada con los problemas del corazón y los vasos sanguíneos. Con frecuencia, estos inconvenientes de salud tienen que ver con la aterosclerosis, una afección que se presenta cuando la grasa y el colesterol se acumulan en las paredes de las arterias.
A esta acumulación se le denomina placa, la cual con el tiempo puede estrechar los vasos sanguíneos y causar problemas en todo el cuerpo. Si una arteria resulta obstruida, esto puede llevar a que se presente un ataque cardíaco o un accidente cerebrovascular.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), la enfermedad cardíaca es la principal causa de muerte en Estados Unidos y en casi todo el mundo, al punto que una de cada cuatro muertes se presenta por esta problemática.
Dada la importancia que cobran todos estos padecimientos, los cuales pueden generar graves afectaciones a la salud, el Instituto Mayo Clinic recomienda consumir productos que contengan omega 3, los cuales podrían reducir el riesgo de tener enfermedades cardíacas.
Por su parte, American Heart Association recomienda que las personas coman pescado rico en grasas insaturadas (omega 3) al menos dos veces por semana. Estos ácidos grasos y otros nutrientes del pescado pueden beneficiar la salud del corazón y reducir el riesgo de que se presente alguna enfermedad cardíaca mortal.
A algunas personas les preocupan el mercurio u otros contaminantes presentes en los mariscos. Sin embargo, según esta institución, los beneficios de comer pescado como parte de una dieta saludable generalmente superan los posibles riesgos de exposición a los contaminantes.
Aunque todos los ácidos grasos omega 3 reducen el colesterol malo y debido a que son grasas poliinsaturadas tienen un efecto antiinflamatorio, lo que conlleva a que este tipo de grasa ayude a la prevención de diferentes enfermedades, existen varias clases de omega 3, entre las que está el ácido alfa linolénico (ALA), predominante en alimentos de origen vegetal; el ácido eicosapentanóico (EPA) y el ácido docosahexanoico (DHA), un componente indispensable para el correcto funcionamiento de las membranas celulares del organismo.
Ahora bien, entre las propiedades del omega 3 más destacadas están su efecto antiinflamatorio y autoinmune, lo que favorece el tratamiento de enfermedades con procesos inflamatorios, problemas cardiovasculares, así como beneficios en cuanto a frenar el proceso de envejecimiento.
Asimismo, este tipo de grasa poliinsaturada ayuda a tratar enfermedades como la artritis reumatoidea, la colitis ulcerosa o el lupus, y también a reducir el riesgo de padecer aterosclerosis, trombosis y otros problemas vasculares.
Los omega 3 también son buenos para el corazón y los vasos sanguíneos dado que ayudan a reducir los triglicéridos, un tipo de grasa en la sangre; reducen el riesgo de desarrollar latidos cardíacos irregulares (arritmias), entre otros beneficios.
Es importante resaltar que aunque este omega funcione para el cuerpo, según Mayo Clinic hay muchos tipos de colesterol y los siguientes son los más nombrados:
- Colesterol total: todos los colesteroles combinados.
- Lipoproteína de alta densidad (colesterol HDL), con frecuencia llamado colesterol “bueno”.
- Lipoproteína de baja densidad (colesterol LDL), con frecuencia llamado colesterol “malo”.
Asimismo, los números más altos son mejores para el colesterol bueno (HDL), porque un nivel alto de HDL puede reducir el riesgo de enfermedad coronaria y accidente cerebrovascular y este es el nivel saludable de colesterol HDL:
- Edad 19 años o menores: más de 45 mg/dL.
- Hombres de 20 años y mayores: más de 40 mg/dL.
- Mujeres de 20 o mayores: más de 50 mg/dL.
No obstante, el portal portugués de salud, nutrición y bienestar Tua Saúde indicó que, si se tiene el colesterol bueno bajo, se puede padecer obesidad, hipertensión y diabetes y, aunque indicó que no hay un signo o síntoma que lo advierta, sí puede ser una señal de alerta cuando “hay exceso de grasa abdominal, si la persona tiene una alimentación rica en grasa y alimentos industrializados y no practica actividad física de forma regular”.