Las frutas son una de las categorías de alimentos que siempre deben estar incluidas dentro de la dieta diaria de las personas, pues tanto la pulpa como las semillas producen muchos beneficios para el organismo.
Cada tipo de fruta tiene unos componentes específicos que ayudan a prevenir enfermedades o a controlarlas, de ahí la importancia de conocer cada vez más acerca de ellas, para potencializar su efecto.
El aporte de la papaya a la salud de las personas
La pulpa de la fruta es bien conocida, sin embargo, la mayoría de las personas desconocen que las semillas también son beneficiosas, por lo que no se deberían desechar.
La papaya es una fruta muy saludable, pero no mucha gente sabe que sus semillas también son muy beneficiosas, pues entre sus cualidades está el hecho de ayudar a limpiar y desintoxicar el hígado.
La papaya es una fruta exótica, propia de las zonas tropicales, y con el tiempo se ha convertido en una de las preferidas por las personas que están buscando perder algunos kilos de más.
No solo es diurética y mejora el aspecto de la piel, sino que evita el estreñimiento, tiene propiedades antioxidantes y mejora el sistema inmune.
Por otra parte, la ciencia ha demostrado que la papaya tiene grandes beneficios para la salud. Por eso, un estudio hecho en la Escuela de Agricultura de la Universidad de Hainan, China, dejó constancia de que la papaya reduce el riesgo de padecer cáncer, sin contar que el Departamento de Nutrición de la Escuela de Salud Pública de Harvard, llegó a la conclusión de que es un alimento rico en betacarotenos, es decir, antioxidantes que ayudan a prevenir el cáncer de próstata y el asma.
Además, no hay que pasar por alto que proporciona vitamina K, que facilita la absorción de calcio para obtener unos huesos fuertes y sanos.
¿Cómo aprovechar las semillas de papaya?
De acuerdo a lo expuesto en la página mundodeportivo.com. las semillas de papaya son ideales para desintoxicar el hígado y diferentes zonas del organismo, como el aparato digestivo, el hígado y los riñones.
Y este efecto lo logra gracias a un componente conocido como carpaína, un alcaloide que ayuda a eliminar algunos parásitos intestinales. Además, las semillas son fuente de fibra y micronutrientes que luchan contra los radicales libres que originan enfermedades crónicas.
De acuerdo a los resultados de algunas investigaciones científicas, se asegura que las semillas de esta fruta poseen antioxidantes que forman parte de su composición, que de alguna manera frenan el daño oxidativo producido a las células, protegiendo la salud del hígado y los riñones.
Y para poder disfrutar de estos beneficios solo tiene que triturar 10 o 12 semillas y mezclarlas con agua. Esto se debe tomar en ayunas cada día, durante 30 días máximo.
Lo mejor es que consulte a su nutricionista para que él le pueda indicar cuál es el tiempo adecuado para tomar este jugo y así evitar consecuencias inesperadas.
También existe la opción de agregar pulpa de papaya en vez de agua y mezclar los ingredientes.
Después de haber tomado este jugo por el tiempo establecido, comenzará a sentir sus efectos positivos en el organismo de una forma natural y saludable.