El té es una de las bebidas más consumidas a nivel mundial. Como tal, existen distintas clases infusiones que otorgan múltiples beneficios para salud como quemar grasa corporal, reducir los niveles de estrés, bajar la presión arterial, mejorar la digestión o simplemente hidratar el organismo. Sin embargo, no todas las personas consumen el té de forma natural, sino que optan por adicionar leche para que tenga un mejor sabor, lo cual no es muy recomendable.

Con respecto a esta particular combinación, el portal web Mag El Comercio, explica que, por una parte, el té tiene dos compuestos relevantes que son la cafeína y los polifenoles, los cuales son químicos vegetales que dan a estas infusiones su sabor y aroma, pero sobre todo le aporta muchas propiedades a la salud. Especialmente estas dos sustancias actúan como antioxidantes, que controlan los efectos dañinos de los radicales libres en el cuerpo y con ello no solo se previene un envejecimiento prematuro, sino que también se reduce el riesgo de enfermedades.

De este modo, cuando se adiciona la leche, este producto puede reducir la capacidad antioxidante del té, puesto que los flavonoides se “desactivan” cuando se unen a proteínas, según indica la Escuela de Salud Pública de Harvard. Para estos casos, la reducción de la capacidad antioxidante del té se da aún en casos de leche desnatada o semidesnatada.

El té de menta junto con el anís ayudan a desitoxicar y desinflamar el aparato digestivo. | Foto: Mythja/Getty Images

En ese sentido, los expertos de Harvard detallan que aunque el consumo de estos dos productos combinados no afecta la salud, si se verían reducidas las sustancias del té, las cuales ofrecen múltiples beneficios. Adicional a ello, una investigación publicada European Heart Journal, señala que “el té por sí solo es un producto natural con un olor, color y sabor únicos, que al añadirle el jugo blanco se ven afectados. Además, la caseína de la leche (fosfoproteína asociada al calcio) alteraría o disminuiría las propiedades con las que cuenta”, explica Isabel Artero, especialista sobre el estudio.

Beneficios del té

  • Protege al sistema inmunológico: el té contiene una gran cantidad de flavonoides y vitamina H, dos nutrientes que ayudan a que las defensas del cuerpo funcionen y de la misma manera, eluden el daño celular.
Té de perejil | Foto: GettyImages
  • Aporta hidratación: al ser una bebida natural, principalmente contribuye a una buena hidratación para que el cuerpo funcione correctamente. Además, es una forma distinta de tomar los 2 litros de agua recomendados al día.
  • Ayuda a bajar de peso: esta es una de las mejores bebidas para adelgazar, puesto que al consumirla caliente le aporta al organismo un efecto saciante y eso ayuda a eliminar la ansiedad por la comida.

Beneficios de la leche

  • Ayuda a conciliar el dormir: la leche es una bebida que ayuda a dormir rápidamente, gracias a su contenido de calcio, que estimula la relajación y el aminoácido triptófano, que aumenta la cantidad de serotonina en el cerebro.
  • Potencializa la actividad física: al igual que el té, la leche es una bebida muy hidratante que al consumirla luego de hacer ejercicio, beneficia los músculos y la hidratación del cuerpo.
La leche vegetal no contiene colesterol y es saludable para el organismo. | Foto: Getty Images
  • Previene el cáncer: Varios estudios han demostrado que la leche y sus nutrientes, como el calcio, la vitamina D, la lactoferrina y las proteínas del suero de leche, tienen efectos positivos sobre la reducción de posibilidad de contraer cáncer, especialmente el de colon.