El tomillo es una planta medicinal cuyo nombre científico es Thymus vulgaris y normalmente se usa en la cocina para dar sabor y aroma a la comida.
No obstante, esta planta no solo sirve en la cocina, pues por sus propiedades es muy utilizada para tratar problemas de salud, como la bronquitis o tos, entre otras.
De hecho, el portal portugués de salud, nutrición y bienestar Tua Saúde reveló que entre las propiedades más comunes del tomillo se destacan:
1. Combatir la tos: “es rico en sustancias con acción antiinflamatorias, expectorantes y antitusígenas, como el carvacrol y el γ-terpineno”.
2. Controlar la presión arterial: aporta “timol y α-terpineol, que tienen acción antihipertensiva que actúan reduciendo la presión arterial, siendo muy útil para ayudar a controlar la presión alta”.
3. Prevenir enfermedades cardiovasculares: por sus propiedades antioxidantes se reducen “los daños de los radicales libres en las células, manteniendo los vasos sanguíneos saludables, ayudando a disminuir los niveles de colesterol malo y aumentando el colesterol bueno”.
4. Combatir el acné: esta planta “posee acción antiséptica, desinfectante y antimicrobiana”.
5. Mantener la salud de los dientes y las encías: por sus propiedades antimicrobianas preveiene la propagación de bacterias como “Streptococcus mutans, Staphylococcus aureus, Escherichia coli y Candida albicans, que puede causar caries y gingivitis”.
6. Combatir las infecciones causadas por hongos: “el timol y el limoneno, presentes en la composición del aceite esencial de tomillo, poseen una fuerte acción antifúngica que ayudan a eliminar los hongos, como la Candida Albicans, que puede causar infecciones en la piel y uñas”.
7. Combatir la ansiedad y el estrés: aporta “kaempferol, carvacrol y linalool, ayudan a combatir la ansiedad y el estrés, aumentando la actividad de los neurotransmisores en el cerebro, como el CABA, que contribuye en la sensación de relajamiento en el cuerpo, bienestar y tranquilidad, disminuyendo los síntomas de ansiedad como agitación y nerviosismo”.
8. Ayudar en el tratamiento del alzhéimer: “el timol que aporta tiene acción antioxidante, antiinflamatoria y neuroprotectora, reduciendo la inflamación y los daños causados por los radicales libres en el sistema nervioso, lo que puede ayudar en el tratamiento del alzhéimer”.
9. Ayudar a combatir el cáncer: aporta sustancias anticancerígenas que ayudan a “combatir el cáncer de mama, intestino, cuello de útero, hígado y pulmón”.
Ahora bien, respecto al consumo, aparte de sazonar las carnes, pescados, legumbres o sopas, se puede preparar un té y solo hay que hervir una taza de agua para, después, agregar dos cucharadas de hojas picadas que se deben dejar reposar por diez minutos y, finalmente, se cuela y se bebe hasta tres veces al día.
Ahora bien, pese a que aporta varios beneficios, esta planta medicinal está contraindicada en algunas personas y, según el portal portugués, las mujeres embarazadas, las que están lactando, los menos de seis años y los pacientes con insuficiencia cardíaca, enterocolitis o en el periodo postquirúrgico, deben evitar su consumo.
Asimismo, indicó que “también debe ser utilizado con precaución durante la menstruación, gastritis, úlcera, colitis, endometriosis, síndrome del intestino irritable o en casos de enfermedades hepáticas”.
De todos modos, antes de consumir alguna planta medicinal, lo primero que se debe hacer es consultar a un experto de la salud, para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona, ya que muchas personas creen que usar plantas para tratar una enfermedad es más seguro que tomar un medicamento, pues las personas han estado usando plantas en medicina popular durante cientos de años, pero estas pueden ser tóxicas en dosis altas, puesto que pueden causar efectos secundarios, según Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.