El yogur fue durante varios años una de las comidas típicas de la India y Europa Central pues, aunque no es determinante para la prevención de enfermedades, sus componentes mejoran considerablemente la calidad de vida.

Este producto suele ser un derivado de la leche fermentada y algunos microorganismos que se aplican para que tome consistencia y sabor.

Así mismo, el yogur posee una variedad de nutrientes que son beneficiosas para el organismo. Incluso, el portal especializado Saber Vivir listó una serie cualidades que tiene el yogur si se consume, por lo menos, uno diario:

  • Previene el mal aliento: en una investigación citada por el mismo medio, se comprobó que este alimento ayuda a combatir el mal aliento, las caries y algunas enfermedades en las encías.
  • Mejora la digestión: los probióticos en el producto incrementan la resistencia a infecciones por organismos potencialmente patógenos en el intestino; incrementan el valor nutricional, mejorando la digestión y la absorción de vitaminas y minerales; regulan la morbilidad intestinal; y mantienen la integridad de la mucosa intestinal.
  • Alivia la gastritis: los suplementos probióticos introducen bacterias buenas al tracto digestivo, lo que puede ayudar a detener la propagación de la Helicobacter pylori, asociada a los dolores en la boca del estómago. Comer alimentos que contienen probióticos como yogur, también puede mejorar los síntomas de la gastritis.

Cabe resaltar que El magazín El Mundo Deportivo, en su sección de salud y bienestar, señala que la composición del yogur es rica en calcio y nutrientes, así como bacterias vivas y probióticos, todos ellos beneficiosos para la salud.

Por ejemplo, el yogur natural (sin azúcar) es un alimento nutritivo y recomendable para complementar la dieta y cuidar la salud del organismo. Además de aportar calcio para los huesos, contiene “cultivos vivos” que repueblan la microbiota intestinal para lograr una mejor salud digestiva, según el portal Mejor con Salud.

También, su consumo tiene fama de ayudar a perder peso siguiendo una dieta de control de calorías. Incluso, la plataforma Yogurt in Nutrition afirma que varios estudios científicos han demostrado que el yogur tiene una asociación positiva con la reducción de la grasa corporal.

De hecho, un estudio realizado entre 34 personas obesas demostró los efectos positivos de consumir yogur en la dieta de adelgazamiento. Las personas que incluyeron tres porciones diarias de yogur sin grasa como parte de una dieta de restricción energética perdieron un 22 % más de peso corporal y un 61 % más de grasa corporal que quienes no consumían yogur.

Por otro lado, el yogur es uno de los alimentos que más pueden beneficiar al cuerpo después de ir al gimnasio. Pese a lo anterior, es preciso señalar que no puede ser cualquier yogur, sino uno que no contenga azúcar añadido ni grasa y que sea natural.

Un tipo de yogur que se adapta a los parámetros mencionados es el yogur griego, el cual puede combinar muy bien con un poco de fruta fresca a cualquier hora del día.

Saber Vivir recomienda que la ingesta de estos lácteos y sus derivados sea por la noche, pues no solo ayudarán a recuperar el músculo, sino también favorecerán el buen descanso, toda vez que son ricos en triptófano, un aminoácido esencial que permite controlar el insomnio.