En los últimos años, las semillas de chía se han popularizado significativamente en las dietas para bajar de peso y en cuanto a la salud en general.

En concreto, las semillas de chía contienen ácidos grasos omega-3 y 6, el doble de proteínas que otras semillas, compuestos antioxidantes, fibra y minerales que protegen el organismo de diversas enfermedades.

La revista International Journal of Molecular Sciences señala que la chía previene el estreñimiento y mejora la diversidad de la flora intestinal. Además, disminuye la inflamación muscular después de un ejercicio intenso y contribuye a reducir la sensación de apetito.

Además, sus efectos beneficiosos en la diabetes, el colesterol, la hipertensión, su potencial antioxidante, y sus propiedades laxantes y antiinflamatorias, entre otras, están confirmados científicamente, según una revisión de estudios publicada en Journal of Food Science and Technology.

Por otro lado, la llaman la reina de los omega-3, ya que es una excelente fuente vegetal de ácidos grasos poliinsaturados, en especial de ácido alfalinolénico (ALA), el precursor vegetal del omega-3, según el portal especializado en salud, Cuerpo y Mente.

Asimismo, las semillas de chía llenan el estómago y producen sensación de saciedad gracias a su gran capacidad de absorber líquidos. Además, regula los niveles de azúcar en la sangre y ayuda a evitar los antojos por los dulces.

De igual manera, es necesario destacar que con 30 gramos de chía se obtiene el 20 % de la cantidad de calcio recomendada, (mineral fundamental para mantener la estructura ósea).

Adicional a lo anterior, la chía tiene una alta concentración de fenoles, unos antioxidantes que frenan hasta el 70 % de la actividad de los radicales libres. Esto ayuda a prevenir el envejecimiento prematuro de la piel y a reparar los tejidos musculares.

Aunque las semillas de chía tienen extensas propiedades estas no se deben consumir en exceso porque frena sus beneficios. Si una persona consume estas semillas todos los días el portal Atida Mi Farma señala que por la alta cantidad de fibra pueden aparecer problemas digestivos como la distensión abdominal, inflamación, enfermedad de Crohn y gases. Además, el exceso de chía no permite una absorción debida de nutrientes como el hierro.

¿Cómo preparar agua de chía para adelgazar?

El portal de salud, belleza y cuidado personal Mejor con Salud brinda la receta de una bebida “capaz de depurar el organismo, aportar numerosos antioxidantes y facilitar la pérdida de peso”.

Antes de consumirla, se recomienda contar con la aprobación de un médico, cabe mencionar, que para que la bebida tenga un efecto positivo se debe acompañar de una dieta sana y de la práctica de actividad física frecuente y de acuerdo a la edad.

Agua de semillas de chía con limón para bajar de peso

Ingredientes:

  • 1 cucharadita de semillas de chía (5 g).
  • 1 vaso y ½ de agua (300 ml).
  • Un limón.
  • 1 cucharada de miel (25 g).

Preparación:

  • Exprimir el limón. Una vez listo, mezclarlo con el vaso de agua.
  • Luego, mezclar todo, el agua con el zumo de limón, junto con el agua donde las semillas de chía han formado ese gel.
  • Para que la bebida quede con una mejor textura se puede hacer uso de la licuadora para mezclar todo. Se puede incluir una cucharada de miel, para endulzar la bebida.

Contenido nutricional de las semillas de chía:

  • Calorías: 371 kcal.
  • Proteínas: 21,2 g.
  • Carbohidratos: 42 g.
  • Grasas totales: 31,6 g.
  • Grasas saturadas: 3,2 g.
  • Grasas poliinsaturadas: 25,6 g.
  • Omega 3: 19,8 g.
  • Omega 6: 5,8 g.
  • Vitamina A: 49,2 UI.
  • Calcio: 556,8 mg.
  • Fósforo: 750,8 mg.
  • Magnesio: 326 mg.
  • Zinc: 44,5 mg.
  • Potasio: 666,8 mg.
  • Ferro: 6,28 mg.
  • Fibras totales: 41,2 g.
  • Fibras insolubles: 35,9 g.
  • Fibras insolubles: 35,9 g