Mucho se habla de la importancia de alimentarse sanamente y hacer actividad física como buenos hábitos para cuidar de la salud, pero no son las únicas prácticas beneficiosas para el ser humano.
De hecho, como parte de la rutina diaria, es fundamental mantener una correcta higiene, que no consiste solo en bañarse todos los días o lavarse las manos cada que tenga oportunidad de hacerlo, también en que las personas sean limpias con sus prendas de vestir, especialmente con la ropa interior.
Como explica el portal Mejor con Salud, el uso de ropa interior no es nuevo, se remonta a la antigüedad, cuando algunos pocos eran privilegiados por usarla. Desde entonces, ha variado su diseño y las telas que se emplean, buscando que sea más cómoda y se ajuste a las necesidades de las personas.
Su función principal, indican en el portal, es mantener la ropa exterior limpia, puesto que estas prendas contienen el sudor y demás sustancias corporales que se producen en dichas zonas a lo largo del día.
Es así que una buena parte de la población utiliza estas prendas, muchas veces sin prestar mayor atención al cuidado que deben tener con su uso. Justo acerca de esta cuestión, un artículo del diario La Vanguardia explica los principales riesgos de repetir la ropa interior.
Pese a que lo más recomendable es cambiar las bragas (pantaletas, cacheteros o pantis, como se les conoce también popularmente) a diario, no todas las personas lo hacen. Se aconseja no usar dos veces la misma prenda debido a que en ellas se acumula suciedad, sudor y otras secreciones durante el día, lo que puede poner en riesgo la salud.
“Infecciones, irritación, secreción anormal y erupciones cutáneas deberían hacerte pensar dos veces antes de volver a usar la ropa interior durante varios días”, indica Elle Macleman, bioquímica del cuidado de la piel, consultada por el referido medio. Un peligro que no es menor si se tiene en cuenta que los genitales son una zona sensible del cuerpo.
También es una cuestión de estética, puesto que usar la misma prenda interior más de una vez puede generar malos olores que interfieran en el encuentro con la pareja o se puedan percibir a través de la ropa.
Por otra parte, el portal Salud180 indica que se puede provocar otras molestias durante el día, como picazón en la piel, debido a la acumulación de bacterias en la zona. “La terrible sensación de picazón puede ocurrir en cualquier parte de tu piel que use prendas sucias, pero puede volverse especialmente molesto en la zona íntima, provocándote una irritación que te cause tanta molestia que no puedas dejar de rascarte”, añaden desde el medio.
Uno de los mayores peligros que se corre al utilizar prendas sucias es la posibilidad de contraer una infección. Según explican los expertos de Salud180, esto sucede porque se crea un ambiente propicio para la reproducción de bacterias y hongos, al ser un área húmeda, generalmente cubierta por la ropa exterior y que puede cambiar de temperatura a lo largo de la jornada.
Es debido precisar que, tanto los hombres como las mujeres, están expuestos a estas consecuencias, cuando no se tenga la higiene adecuada.
Entre otras recomendaciones para cuidar la ropa interior y prevenir el desarrollo de infecciones es utilizar un jabón neutro para lavarlas y renovarlas constantemente, por lo menos una o dos veces al año.
Asimismo, se aconseja que lavar las prendas nuevas que se compren antes de usarla, ya que se puede haber contaminado en el proceso de distribución desde el lugar de producción hasta las tiendas.