El estreñimiento más que una enfermedad se define como la apreciación de cada persona sobre su hábito intestinal. Se caracteriza por tener menos de tres evacuaciones a la semana; las heces son duras, secas o grumosas y el proceso de evacuación resulta difícil y doloroso, según el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales de Estados Unidos.

Cuando un individuo presenta esta afección es posible que presente distensión abdominal y dolor de estómago y, en situaciones graves, puede causar pérdida del apetito. En caso de que haya dolor intenso o heces con sangre, es importante acudir al médico con el fin de iniciar el tratamiento adecuado.

Según el portal Medical News Today, una persona puede experimentar este padecimiento debido a los alimentos que come o evita, sus hábitos en el estilo de vida, los medicamentos que consume o las afecciones médicas que tiene. En muchas ocasiones, la razón detrás del estreñimiento es desconocida y a esto se le conoce como constipación idiopática crónica.

Una de las mejores estrategias para regular el intestino es comer fibras en todas las comidas, además de beber bastante agua para que ayuden a ablandar las heces, facilitando su salida de forma natural, precisa el portal de bienestar y salud Tua Saúde.

De acuerdo con los expertos, es determinante llevar una dieta equilibrada que incluya muchas frutas y verduras, pero también la práctica regular de ejercicio. Estos hábitos pueden complementarse con algunos remedios caseros que ayudan a regular el tránsito intestinal. Estos son algunas opciones.

Ciruelas pasas

Las ciruelas pasas son ricas en fibra y contienen sorbitol, un tipo de alcohol azucarado que tiene un efecto laxante. “Algunos estudios han demostrado que las ciruelas pasas pueden ser más eficaces que fibras como el psyllium”, precisa Medical News Today. La dosis efectiva puede ser de unos 50 gramos o siete ciruelas pasas medianas, dos veces al día.

Naranja y papaya

Este remedio es favorable debido a que las dos frutas tienen fibras y antioxidantes que ayudan al intestino a funcionar mejor. Para prepararlo se requiere de dos naranjas y media papaya sin semillas. Se exprimen las naranjas y se ponen en la licuadora junto con la papaya pelada y picada en trozos. Se puede tomar esta bebida antes dormir y en la mañana, durante tres días.

Probióticos

Estos alimentos ayudan a prevenir el estreñimiento crónico. Los probióticos son bacterias beneficiosas vivas que se encuentran naturalmente en el intestino y por ello las personas pueden aumentar sus niveles al comer alimentos probióticos.

Algunos pacientes con constipación crónica presentan un desequilibrio de bacterias en el intestino. Consumir más alimentos probióticos podría ayudar a mejorar este equilibrio y prevenir el estreñimiento. “Una revisión de 2019 encontró que tomar probióticos durante dos semanas ayuda a tratar la constipación, aumentando la frecuencia y la consistencia de las heces”, precisa Medical News Today.

Aceite de oliva

El aceite extra virgen y las grasas saludables en general lubrican el bolo fecal. Aliñar con abundante aceite las ensaladas o verduras ayuda a mejorar el tránsito intestinal. Lo ideal, de acuerdo con el portal Cuerpo Mente, es usar al menos cuatro cucharadas al día, de este producto para aderezar.

Aguacate

Esta fruta es rica en carbohidratos en forma de fibra soluble e insoluble. La primera favorece el efecto de arrastrar y el de aumentar el volumen de las heces, y la segunda actúa como prebiótico. Además, el aguacate es rico en grasas saludables. La recomendación de los expertos es incluir en la dieta diaria medio aguacate maduro en ensalada o cremas de verduras.

Papaya y linaza

Estos dos alimentos son ricos en fibra y, por lo tanto, ayudan a combatir esta afección. Para preparar un jugo se utiliza media papaya sin semillas; un vaso de agua o un yogur natural y una cucharada llena de linaza. Se puede agregar miel si se desea. Se licúa la papaya junto con el agua o el yogur y luego se añade la linaza y se endulza a gusto.

Este remedio casero puede ser utilizado incluso por niños pequeños. Sin embargo, en estos casos se recomienda no endulzarlo y la miel solamente debe utilizarse en menores a partir de un año de edad.

Por último, según Medical News Today en algunos casos se deberían evitar los lácteos. Por ejemplo, en personas con intolerancia a estos alimentos, pues podrían tener algún efecto en los movimientos del intestino. Esto incluye a los niños que son intolerantes a la proteína de la leche de vaca y a los adultos con intolerancia a la lactosa.