El azúcar alta en la sangre también es llamada glucosa alta en sangre, o hiperglicemia casi siempre ocurre en personas que tienen diabetes, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Además, señaló que los síntomas del azúcar alta en la sangre pueden incluir:

  • Estar muy sediento o tener la boca seca.
  • Tener visión borrosa.
  • Tener la piel seca.
  • Sentirse débil o cansado.
Los pacientes de diabetes deben prestar atención a su alimentación para controlar la enfermedad. | Foto: Peter Dazeley | Getty Images
  • Necesidad de orinar mucho, o necesitar levantarse más seguido de lo usual en la noche para orinar.

De hecho, el portal de salud KidsHealth, explicó que tener demasiado azúcar en la sangre durante largos periodos de tiempo puede causar problemas de salud graves si no se trata, ya que la afección puede dañar los vasos sanguíneos que llevan sangre a órganos vitales, lo que puede incrementar el riesgo de enfermedades de corazón, accidentes cerebrovasculares, enfermedades renales, problemas en la vista y problemas neurológicos.

Por ello, si tras exámenes médicos se detecta que el azúcar está alta, hay que tener cambios en los hábitos para reducir los niveles y una recomendación alimentaria de la biblioteca es comer una variedad de alimentos saludables de todos los grupos de alimentos:

  • Frutas y vegetales al menos 400 g (o sea, cinco porciones).
  • Granos integrales como trigo integral, arroz integral, cebada, quinua y avena.
  • Proteínas, como carnes magras, pollo, pavo, pescado, huevos, nueces, frijoles, lentejas y tofu.
  • Productos lácteos descremados o bajos en grasa como leche, yogur y queso.
Una alimentación saludable es clave para prevenir enfermedades. | Foto: Getty Images

Entre tanto, el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales, que hace parte de los Institutos Nacionales de Salud de los Estados Unidos, indicó que los alimentos y bebidas que hay que limitar incluyen:

  • Alimentos fritos y otros ricos en grasas saturadas y grasas trans.
  • Alimentos con alto contenido de sal, también llamado sodio.
  • Dulces, como productos horneados, dulces y helados.
  • Bebidas con azúcares agregados, como jugos, gaseosas y bebidas regulares para deporte o energéticas.

Por su parte, señaló que el método del plato ayuda a controlar el tamaño de las porciones y no habrá necesidad de contar calorías, ya que el método muestra la cantidad de cada grupo de alimentos que se debe comer y funciona mejor para el almuerzo y la cena.

Así las cosas, hay que utilizar un plato de 9 pulgadas (15 cm) de diámetro y hay que llenar la mitad del plato con las verduras sin almidón. En un cuarto del plato se debe colocar una carne u otra proteína y en el último cuarto del plato hay que poner los granos u otro tipo de fuente de almidón.

Además, también se puede comer una taza pequeña de fruta o un pedazo de fruta y tomar un vaso pequeño de leche si está incluido en el plan de alimentación.

Medir los alimentos ayudará a evitar comer en exceso. | Foto: Getty Images

De otro lado, el Instituto puntualizó que se pueden utilizar objetos cotidianos o la mano para calcular el tamaño de una porción:

  • 1 porción de carne o pollo equivale a la palma de la mano o a una baraja de cartas.
  • 1 porción de 3 onzas (100 g) de pescado equivale al tamaño de una chequera.
  • 1 porción de queso equivale a seis dados.
  • ½ taza de pasta o de arroz cocinado equivale a un puñado o al tamaño de una pelota de tenis.
  • 1 porción de panqueque o waffle equivale al tamaño de un DVD.
  • 2 cucharadas de mantequilla de maní equivalen al tamaño de una pelota de ping-pong.

De todos modos, la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica y por ello lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona.