Algunas personas consideran que si comen cualquier alimento en la noche van a subir kilos y van a dañar su proceso de pérdida de peso o perderán el peso saludable que tienen.

Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, explica que este es un mito muy popular. Por eso, algunas personas prefieren saltarse la cena. Respecto a esto, aclara que “las personas que comen tarde por la noche tienden a subir de peso. Una posible razón es que quienes comen arde en la noche tienden a elegir refrigerios altos en calorías. Algunas personas que comen refrigerios tras la cena no duermen bien, lo que puede llevar a antojos poco saludables al día siguiente”.

La Biblioteca recomienda que en caso de tener hambre luego de haber cenado, se consuman refrigerios saludables como un poco de yogurt bajo en grasas.

Si se está en un proceso de pérdida de peso, es importante acudir a un médico y a un nutricionista para obtener un plan especializado y obtener buenos resultados. En caso de no estarlo, es importante saber que aunque cada cuerpo es diferente, la regla general indica que sí se debe comer en la noche.

Mejor con Salud, portal especializado en salud y cuidado personal, explica varias opciones de platos de comidas para elegir en la noche:

  1. Huevos cocidos: este alimento puede ser parte de una cena ligera. Puede complementarse con tortillas o ensalada de tomate.
  1. Queso con nueces: debido a que el queso tiene muchas calorías se debe comer un trozo pequeño y moderado. Se puede acompañar con nueces y agregar verduras para obtener una ensalada.
  1. Pescado: según indica Mejor con Salud, el pescado blanco y azul son opciones saludables para la cena, acompañados con verduras. “Sin embargo, preparado de forma suave (a la plancha o al horno) es una opción perfecta que también aporta ácidos grasos omega-3 y vitamina D”, agrega el portal.

Bajar de peso

Antes de iniciar un proceso de pérdida de peso es importante consultar a un médico para que, teniendo en cuenta las características individuales de cada persona, el profesional confirme si es necesario perder kilos, teniendo como prioridad la salud. Esto puede ser por sobrepeso o para gestionar otras afecciones de salud.

Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, señala una lista de preguntas para realizarse antes de iniciar un proceso de pérdida de peso y estar seguro de estar preparado para los cambios que se van a experimentar:

  • “¿Estoy motivado para bajar de peso?
  • ¿Estoy demasiado distraído por otras presiones?
  • ¿Utilizo la comida como medio para hacer frente al estrés?
  • ¿Estoy listo para aprender o utilizar otras estrategias para hacer frente al estrés?
  • ¿Necesito otro tipo de apoyo, ya sea de amigos o profesionales, para manejar el estrés?
  • ¿Estoy dispuesto a cambiar mis hábitos de alimentación?
  • ¿Estoy dispuesto a cambiar mis hábitos de actividad?
  • ¿Tengo el tiempo necesario para hacer estos cambios?”.

Realizar una lista con las motivaciones para hacerlo también es otro de los consejos que brinda Mayo Clinic. Es importante encontrar la motivación interior y aquello que será un impulso para completar el proceso de pérdida de peso.

“Haz una lista de lo que es importante para ti así te mantienes motivado y concentrado, ya sea que se trate de tus próximas vacaciones o de lograr una mejor salud general. Luego, fíjate cómo puedes recurrir a los factores que te motivan durante los momentos de tentación. Por ejemplo, tal vez quieras ponerte una nota de ánimo en la puerta de la despensa o en el refrigerador”, recomienda la entidad de salud.