La hipotensión sucede cuando la presión arterial es mucho más baja de lo normal y esto significa que el corazón, el cerebro y otras partes del cuerpo no reciben suficiente sangre, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Además, Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, señaló que entre los tipos de presión arterial baja, se incluyen los siguientes:

  • Hipotensión ortostática (hipotensión postural). Se trata de un descenso abrupto de la presión arterial cuando una persona se pone de pie o después de acostarse. Entre sus causas, se incluye la deshidratación, el reposo en cama durante un tiempo prolongado, el embarazo, determinadas afecciones médicas y algunos medicamentos. Este tipo de presión arterial baja es común en los adultos mayores.
Lo que se considera presión arterial baja para una persona puede estar bien para otra. | Foto: Getty Images
  • Hipotensión posprandial. Este descenso de la presión arterial se produce de una a dos horas después de comer. Es más probable que afecte a adultos mayores, especialmente a aquellos con presión arterial alta o enfermedades del sistema nervioso autónomo, como la enfermedad de Parkinson. Comer porciones pequeñas de comidas bajas en carbohidratos, beber más agua y evitar el consumo de alcohol podría ayudar a reducir los síntomas.
  • Hipotensión mediada por los nervios. Consiste en un descenso de la presión arterial que se produce después de permanecer de pie durante períodos prolongados. Este tipo de presión arterial baja afecta principalmente a adultos jóvenes y niños. Podría deberse a la falla en la comunicación entre el corazón y el cerebro.
  • Atrofia multisistémica con hipotensión ortostática. Este trastorno poco frecuente, también denominado síndrome de Shy-Drager, afecta el sistema nervioso que controla las funciones involuntarias, como la presión arterial, la frecuencia cardíaca, la respiración y la digestión. Está relacionado con tener una presión arterial muy alta al estar acostado.
Existen distintos tipos y causas de la presión arterial baja. | Foto: Getty Images

Así las cosas, los síntomas de la presión arterial baja pueden incluir:

  • Visión borrosa.
  • Confusión.
  • Vértigo.
  • Desmayo (síncope).
  • Mareo.
  • Somnolencia.
  • Debilidad.

Ahora bien, la presión arterial extremadamente baja puede provocar una afección conocida como choque y los síntomas del choque incluyen los siguientes:

  • Confusión, especialmente en las personas mayores.
  • Piel fría y húmeda.
  • Disminución de la coloración de la piel (palidez).
  • Respiración superficial y rápida.
  • Pulso débil y acelerado.

Entre tanto, de acuerdo la entidad sin ánimo de lucro, la presión arterial baja (hipotensión) sin síntomas o con síntomas leves rara vez requiere tratamiento.

Sin embargo, según la edad, la salud y el tipo de presión arterial baja, hay varias maneras de elevarla como, por ejemplo:

  • Usar más sal. Los expertos suelen recomendar que se limite la sal (sodio) en la dieta, porque puede elevar la presión arterial, a veces de forma drástica. Sin embargo, en el caso de la presión arterial baja, esto puede ser bueno.
La presión arterial varía de una persona a otra. | Foto: Getty Images
  • Beber más agua. Los líquidos aumentan el volumen sanguíneo y ayudan a prevenir la deshidratación, lo que es importante para tratar la hipotensión.
  • Medicamentos. Hay muchos medicamentos disponibles para tratar la presión arterial baja que se produce al ponerse de pie (hipotensión ortostática). Por ejemplo, la fludrocortisona aumenta el volumen sanguíneo. Se utiliza generalmente para tratar la hipotensión ortostática.
El nombre médico de la presión arterial baja es hipotensión. | Foto: Getty Images

De todos modos, la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica y por ello lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona.