Cuando el azúcar en la sangre está por debajo de 70 mg/dL (3.9 mmol/L) es considerado bajo y puede ser dañino, así lo reseña MedlinePlus, un servicio de información en línea provisto por la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos. Se trata de una situación que se presenta cuando la glucosa (azúcar) en la sangre del organismo disminuye y es demasiado baja, esta afección es conocida dentro de la comunidad médica como hipoglucemia.
“La insulina es una hormona producida por el páncreas. Es necesaria para movilizar la glucosa hasta las células donde se almacena o se usa para obtener energía. Sin la suficiente insulina, la glucosa se acumula en la sangre en lugar de ir a las células. Esto lleva a que se presenten síntomas de diabetes”, explica MedlinePlus sobre sus causas.
Añade que el bajo nivel de azúcar en la sangre puede ocurrir debido a cualquiera de los siguientes factores: la glucosa del cuerpo se agota con demasiada rapidez; la producción de glucosa en el cuerpo es muy baja y es liberada en el torrente sanguíneo con demasiada lentitud; o cuando se libera demasiada insulina en el torrente sanguíneo.
De acuerdo con el servicio norteamericano, el bajo nivel de azúcar en la sangre es común en los pacientes diabéticos que toman insulina para controlar la enfermedad, así como también puede deberse al ejercicio que practiquen estos pacientes. Además, los bebés que nacen de madres con diabetes “pueden tener caídas drásticas del nivel de azúcar en la sangre justo después del nacimiento”.
En cambio, en palabras de MedlinePlus, el bajo nivel de azúcar en la sangre en las personas que no tienen diabetes puede deberse a: el consumo de alcohol; insulinoma, un poco frecuente tumor del páncreas que produce demasiada insulina; falta o deficiencia de una hormona, como cortisol, hormona de crecimiento u hormona tiroidea; insuficiencia cardíaca, renal o hepática grave; infección que afecta todo el cuerpo (sepsis); algunos tipos de cirugía para bajar de peso (usualmente cinco o más años después de la cirugía); medicamentos que no se utilizan para tratar la diabetes (ciertos antibióticos o medicamentos para el corazón).
En lo que refiere a la sintomatología que se presenta cuando el azúcar es demasiado bajo, el servicio explica que la persona puede presentar: visión doble o borrosa, latidos cardíacos rápidos o fuertes, sensación de irritabilidad o agresividad, nerviosismo, dolor de cabeza, hambre, convulsiones, estremecimiento o temblores, sudoración, hormigueo o entumecimiento de la piel, cansancio o debilidad, sueño intranquilo o pensamiento confuso.
Aclara que no todas las personas experimentan los mismos síntomas cada vez que el azúcar se baja de manera repentina, de hecho, algunos síntomas, como el hambre o la sudoración, pueden aparecer cuando el azúcar en la sangre es solo ligeramente bajo. “Los síntomas más graves, tales como pensamiento confuso o convulsiones, se presentan cuando el azúcar en la sangre es mucho menor (menos de 40 mg/dL o 2.2 mmol/L)”, dice.
En razón a lo anterior, MedlinePlus hace énfasis sobre la importancia que cobra el uso del glucómetro en los pacientes con diabetes, pues el control continuo sobre el nivel de glucosa podría evitar eventos que conlleven a una situación de emergencia.
¿Cómo usar el glucómetro?
La División de Diabetes Aplicada del Centro Nacional para la Prevención de Enfermedades Crónicas y Promoción de la Salud de Estados Unidos reseña estos pasos para usar un glucómetro de forma adecuada:
- El primer paso es asegurarse de que el medidor esté limpio y listo para ser utilizado.
- Luego, se debe sacar una tira de prueba (reactiva) del recipiente, para cerrar de inmediato el contenedor. Advierte que de llegar a estar expuestas a la humedad, las tiras de prueba se pueden dañar.
- El siguiente paso consiste en lavarse muy bien las manos, con agua tibia y jabón, para luego secar muy bien estas extremidades. Recomienda masajear la mano de tal forma que la sangre fluya hacia el dedo que va a ser pinchado. “No use alcohol porque seca mucho la piel”, advierte la División.
- Hecho esto, se utiliza una lanceta para pincharse el dedo. “Presionando desde la base del dedo, ponga suavemente una pequeña cantidad de sangre sobre la tira reactiva”, explica. Esta tira se coloca en el glucómetro.
- Al cabo de unos segundos aparecerá el valor de azúcar en la sangre, este valor debe ser anotado para llevar un registro adecuado sobre esta medición.
- Por último, se desecha la lanceta y la tira en un recipiente de basura. Es importante recordar que el glucómetro y sus utensilios son de uso personal.