La clorfeniramina es un “fármaco antihistamínico sintético perteneciente al grupo de las alquilaminas”, según información de la plataforma AccessMedicina, el cual actúa como escudo o barrera ante la acción de la histamina, una sustancia del cuerpo que genera síntomas como los de la alergia.

Sus efectos inician transcurridos 20 o 30 minutos y pueden llegar a perdurar de seis a ocho horas luego de su ingesta.

Entre los principales beneficios que aporta el consumo de este medicamento en el organismo está ayudar a “aliviar el enrojecimiento, la picazón y el lagrimeo de ojos; los estornudos; la irritación de nariz o garganta, y la secreción nasal, ocasionados por las alergias, la fiebre del heno y el resfriado común”, precisa MedlinePlus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos.

A su vez, este fármaco ayuda a controlar los síntomas ocasionados por los resfriados y las alergias; sin embargo, es importante tener en cuenta que la clorfeniramina “no trata sus causas ni acelera la recuperación”, de acuerdo con la fuente citada.

AccessMedicina añade que este medicamento tiene propiedades sedantes, las cuales ayudan a bloquear los “receptores H1 a nivel del sistema nervioso central”. La mejor forma de que este fármaco se absorba es a través de la mucosa gastrointestinal, la cual distribuye ampliamente en el organismo el 70 % a las proteínas plasmáticas.

Descubriendo el poder de la clorfeniramina. | Foto: Getty Images

“Se biotransforma a nivel hepático, se hidroxila y se conjuga con glucuronato, y se excreta por la orina. Su vida media es de 14 a 25 horas”, señala la plataforma.

La clorfeniramina debe ser usada para tratar síntomas de rinitis alérgica, rinitis vasomotora, conjuntivitis alérgica, reacciones alérgicas a medicamentos o alimentos, picaduras de insectos, dermatitis atópica, dermatitis por contacto.

Eso sí, este fármaco debe ser guiado y recetado por un médico, profesional de la salud, que pueda valorar a la persona y realizarle sus respectivas instrucciones y recomendaciones.

Este medicamento tiene propiedades sedantes para tratar alergias y la picazón. | Foto: Archivo semana

El sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, MedlinePlus, recomienda seguir las instrucciones de un médico de cabecera, que le permita al paciente disminuir o aumentar las dosis.

Generalmente, este fármaco —que viene en tabletas y cápsulas de liberación (acción) prolongada, tabletas masticables, líquido y cápsulas normales— debe ser consumido “cada cuatro a seis horas”.

Contraindicaciones de la ingesta de clorfeniramina

Por último, la clorfeniramina debe ser prohibida en personas que presenten casos de enfermedades como hipersensibilidad al medicamento, estado asmático, hipertensión arterial, retención urinaria, hipertrofia prostática, glaucoma y durante el embarazo.

Asimismo, incrementa los “efectos sedantes de diversos depresores del sistema nervioso central, como alcohol, barbitúricos, benzodiazepinas, neurolépticos y opioides. También interactúa con los inhibidores de la monoaminooxidasa y anticolinérgicos, por lo que debe evitarse su uso simultáneo”.

Las personas que presenten enfermedades como hipertensión arterial no deben consumir este fármaco. | Foto: Peter Cade/Getty Images

De hecho, en caso de que estas personas consuman este medicamento, se puede presentar síntomas, con frecuencia, como somnolencia, sedación, mareo, incoordinación motora, anorexia, náusea, vómito, diarrea, estreñimiento.

Entre otras señales están visión borrosa, confusión, excitación, nerviosismo, delirio, resequedad de boca, hipotensión, taquicardia y erupción cutánea.

Referencias

Clorfeniramina - MedlinePlus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos.

Clorfeniramina: Antihistamínicos • Antialérgicos - AccessMedicina.