La vitamina D es una de las más escasas en el organismo humano, además es una provitamina que interviene en procesos para desarrollar en el sistema el fósforo y el calcio, los cuales están ligados al mantenimiento de los huesos.
“Recientes estudios médicos revelan cómo su déficit se ha convertido en una epidemia silenciosa en todo el mundo”, señala el portal Hola, el cual añade que en “España, donde más del 40 % de los españoles menores de 65 años y más del 80 % de la población senior no alcanzan los niveles adecuados y, en muchos casos, supera a los registrados en los países nórdicos”.
El doctor Josep Blanch, presidente de la Sociedad Española de Investigaciones Óseas y del Metabolismo Mineral, señala que la carencia de la vitamina D se debe “a factores ambientales, sobre todo la elevada contaminación en las ciudades; además de otros como la edad, el tipo de piel, el consumo de determinados fármacos y una dieta pobre en alimentos que contienen dicha vitamina”.
“Fatiga y cansancio, pesimismo y un estado de ánimo más deprimido, ligera excitabilidad, debilidad muscular, nerviosismo e insomnio, antojo de comer dulces, caries y gingivitis”, son algunos de los síntomas que se presentan cuando hay deficiencia de vitamina D, así lo explica Hola.
Rosana Rouco Esteves, del Servicio de Medicina Interna del Hospital Sanitas CIMA, explica que la vitamina D “favorece y garantiza la absorción de calcio desde el tubo digestivo y, más tarde, su correcto depósito en el hueso. La falta de vitamina D se ha relacionado con una gran variedad de situaciones como enfermedades autoinmunes, cáncer, enfermedades metabólicas y enfermedades cardiovasculares; sin embargo, las más importantes son las que se relacionan con el sistema musculoesquelético”.
La doctora Rouco también afirmó que en edades tempranas, la deficiencia de esta vitamina “impide la solidificación de los huesos a través del correcto depósito del calcio. Finalmente estos huesos terminan debilitándose y curvándose, produciéndose lo que se conoce como raquitismo”.
El portal Manual MSD también destaca algunos síntomas cuando el organismo carece de vitamina D. “Los niños mayores y los adolescentes sienten dolor al andar. La carencia grave de vitamina D puede causar piernas arqueadas o rodillas juntas”, en adultos se advierte que “los huesos son débiles, sobre todo en la columna vertebral, la pelvis y las piernas; pueden sentir dolor al tacto en las zonas afectadas, y ser propensos a sufrir fracturas”.
“La carencia de vitamina D puede conducir a una pérdida de densidad ósea, lo que puede llevar a sufrir osteoporosis y fracturas (huesos rotos). La deficiencia severa de la vitamina D también puede conducir a otras enfermedades”, así lo explica Medlineplus.
¿Qué se puede consumir para aumentar los niveles de vitamina D?
El portal Medlineplus señala que hay algunos alimentos en los que se encuentra la vitamina D y se recomienda consumir son:
- Pescados grasos como el salmón, el atún y la caballa.
- Hígado de res.
- Queso.
- Hongos.
- Yema de huevo.
También se puede obtener vitamina D de alimentos fortificados:
- Leche.
- Cereales de desayuno.
- Jugo de naranja.
- Otros productos lácteos, como el yogur.
- Bebidas de soja.