En las diversas culturas que existen en el mundo, la naturaleza es la responsable de diversas preparaciones y secretos que ayudan al cuerpo. Entre esos productos aparece la moringa, una planta que también es conocida como el árbol de la vida.
Aunque es de la India, esta planta también se cultiva en América del Sur y África. Sus múltiples propiedades la han convertido en una representante de la medicina natural. Según estudios, esta tiene propiedades, curativas, antiinflamatorias y antidepresivas. Además, aporta vitaminas, minerales y proteínas.
Durante la pandemia, esta se volvió muy popular debido a sus beneficios para aumentar las defensas del organismo y para recuperarlo del covid-19. Aunque tiene diversas ventajas que ayudan al cuerpo, es necesario consultar a un especialista en cuanto a su uso regular.
¿Qué tipo de enfermedades pueden curar con la moringa?
Sea cual sea la enfermedad que usted pueda padecer, lo primero que se debe hacer es consultar a un especialista para obtener un diagnóstico adecuado y poder empezar un tratamiento oportuno para la afección que se padezca.
Aunque la naturaleza es una gran aliada, la medicina es crucial para la buena salud. Teniendo esto en mente, la moringa puede ayudar a aliviar y prevenir numerosas enfermedades que pueden afectar a las personas por diversos factores.
Un estudio llamado “Efectos benéficos de la Moringa oleífera en la salud de las personas”, publicado en la revista cubana de Medicina General Integral en 2022, explica los padecimientos a los que esta planta ayudar.
Esta investigación expone que el “consumo humano de Moringa oleífera, como parte de la dieta y de remedios terapéuticos durante siglos, sin que se reporten casos de alergias y toxicidad, podría parecer un aval suficiente de su inocuidad. Sin embargo, el conocimiento acumulado no bastaría si no estuviese respaldado por evidencias científicas”.
Respecto a los beneficios para la salud que se han encontrado “la medicina ayurvédica le atribuye propiedades a la Moringa oleífera para el tratamiento de ciertas dolencias como el asma, la epilepsia, las enfermedades oculares y de la piel, la fiebre y las hemorroides”.
“Otras propiedades farmacológicas beneficiosas atribuidas a esta planta y de las cuales se ha obtenido evidencia científica, incluye efectos o acciones de tipo antioxidante, nefroprotectora, hepatoprotectora, neuroprotectora y retardadoras del envejecimiento”, continua dicha investigación.
Por ejemplo, las hojas de la moringa son utilizadas en el tratamiento de enfermedades como la diabetes, obesidad, hipertensión arterial, entre otras. “Esto se debe, sobre todo, al contenido total de fenoles y de flavonoides que contiene, el cual es mayor al de otros vegetales como coliflor, espinacas, repollo, brócoli, o los guisantes”, escriben en el documento.
No solo es la planta lo que ayuda, sino sus partes, por ejemplo, la corteza de la moringa “es un aperitivo digestivo, la goma es un diurético y abortivo, el aceite es usado para enfermedades de la próstata”.
Asimismo, esta también “se emplea en la medicina tradicional para tratar artritis, anemia, desnutrición, enfermedades bronquiales y de la piel, tuberculosis, problemas oculares y síntomas del climaterio. Además, se indica que tiene acción antimicrobiana, antifúngica, inmunomoduladora”.
Este estudio también menciona que la moringa tiene actividad antiviral para afecciones como el virus del Herpes simple, Epstein Barr, hepatitis, rinovirus y el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) al mismo tiempo, se describe que sus flores, vainas y hojas son usadas como antihelmíntico. “Se relata, también, otros posibles usos como afrodisiaco, antiespasmódico, analgésico, antipirético y antinflamatorio, estimulante cardiocirculatorio, agente antiulcerogénico y antilitiásico y antidiarreico, entre otros”.