Algunos científicos han concluido que el ritmo de vida actual está provocando verdaderos estragos en la vida de las personas. Las responsabilidades laborales y las cargas familiares son las culpables del estrés y la ansiedad crónica que muchos sufren cada día. Según la Sociedad Española para el Estudio de la Ansiedad y el Estrés (SEAS), “la mitad de los pacientes que acuden a los Centros de Atención Primaria (49,1%) cumplen los criterios diagnósticos para, al menos, un probable trastorno de ansiedad, depresión o somatización”.

El dolor producido por la ciática se puede extender por las piernas. | Foto: Getty Images

Las consecuencias del estrés

El estrés es un estado de tensión crónica, física y anímica, que aparece al no saber gestionar de manera apropiada la presión psicológica durante un tiempo prolongado. En consecuencia, esta situación puede provocar depresiones y problemas cardiovasculares. Además, el estrés puede derivar en depresiones del sistema inmune, exponiendo y haciendo más susceptibles a: infecciones, insomnio, cansancio, fatiga, disminución de la libido, problemas de memoria, falta de concentración, dolor de cabeza y espalda, malestar estomacal, diarrea o estreñimiento.

¿Qué vitaminas son efectivas para desinflamar los nervios?

Vitaminas del grupo B para el sistema nervioso

El blog dimefar.com destacó que “las vitaminas del grupo B mejoran el estado mental, aumentan la vitalidad y favorecen el buen funcionamiento del sistema nervioso”. En concreto, son las vitaminas B1, B6 y B12 las que pueden ayudar a combatir el estrés y la depresión. A continuación, se explica cómo actúan estas vitaminas en el cuerpo:

La vitamina B1 se encarga de aportar la energía que el cuerpo necesita por medio de algunos alimentos. | Foto: Getty Images
- Vitamina B1

La Natural Medicines Comprehensive Database demostró que “la Tiamina o vitamina B1 se encarga de procesar los carbohidratos de forma correcta. Por ello, la vitamina B1 es eficaz para mantener una actitud mental positiva; aumentar la capacidad de aprendizaje; aumentar la energía; luchar contra el estrés; y para evitar la pérdida de la memoria, incluyendo el Alzheimer”.

- Vitamina B6

La Piridoxina o vitamina B6 es la responsable de producir los glóbulos rojos y el funcionamiento adecuado de los nervios. Por ello, el portal web MedlinePlus recomendó “su ingesta para recuperar la normalidad del sistema nervioso en situaciones de estrés y ansiedad”. Además, el reglamento nº432-2012 de la Comisión Europea certifica que la vitamina B6 contribuye al funcionamiento normal del sistema nervioso.

- Vitamina B12

La cianocobalamina o vitamina B12, del mismo modo que otras vitaminas del grupo B, es muy importante para el metabolismo de las proteínas. Esta vitamina ayuda a la formación de glóbulos rojos en la sangre y al mantenimiento del sistema nervioso central. En este sentido, el reglamento nº432-2012 de la Comisión Europea apuntó que “la cianocobalamina no solo contribuye al funcionamiento normal del sistema nervioso y a la formación normal de los glóbulos rojos, sino que también mejora el funcionamiento normal del sistema inmunitario y ayuda a disminuir el cansancio y la fatiga”.

Asegúrese de consumir suficientes vitaminas para combatir la inflamación

Seguir una dieta variada no solo evita que te aburras de la comida saludable, también es la mejor forma de proporcionarle al organismo los nutrientes necesarios para estar bien.

Además, y según podrás ver, combatir la inflamación puede resultar bastante agradable y sencillo, pues la lista de opciones es amplia. Por último, procura incluir alimentos de todos los tipos en cada comida.

Esta vitamina hace parte del grupo complejo B. Foto: Getty Images. | Foto: Getty Images

¿Cuándo buscar asistencia?

Si la persona no está segura de si el estrés es la causa de algunos de sus problemas o si ha tomado medidas para controlarlo pero los síntomas continúan, debe consultar a un médico. Es posible que el proveedor de atención médica quiera buscar otras causas potenciales. También puede plantearse la posibilidad de ver a un consejero o terapeuta profesional, quien puede ayudar a identificar las fuentes de estrés y aprender nuevas herramientas para enfrentarlo.

Además, puede buscar ayuda de emergencia inmediatamente si tiene dolor en el pecho, en especial si también tiene dificultad para respirar, dolor en la mandíbula o en la espalda, dolor que se irradia al hombro y al brazo, sudoración, mareos o náuseas. Estos pueden ser signos de advertencia de un ataque cardíaco y no simplemente síntomas de estrés.