La pérdida de memoria hace referencia al olvido inusual. Es posible que la persona que padece de este síntoma no sea capaz de recordar hechos nuevos o acceder a uno o más recuerdos del pasado, según explica el portal de salud y medicina MedlinePlus.

Esta patología puede presentarse por un período de tiempo corto y luego resolverse, o puede no desaparecer con el tiempo; sin embargo, esto dependerá de la causa del síntoma. En casos graves este tipo de sintomatología puede afectar de manera contundente las actividades diarias.

Expertos aseguran que una alimentación equilibrada mantendrá de manera sana a todos los órganos del cuerpo, incluyendo el cerebro. El doctor Gurutz Linazasoro, portavoz de la Sociedad Española de Neurología, le aseguró al diario BBC Mundo que “la alimentación es uno de los pocos factores de riesgo de enfermedades neurológicas que está en nuestras manos modificar y controlar”.

Linazasoro enfatizó en que “el patrón dietético que más se ha estudiado es la dieta mediterránea. Se sabe que disminuye el riesgo de padecer alzhéimer y párkinson, también disminuye el de sufrir enfermedades cardiovasculares y disminuye el riesgo de obesidad, que indirectamente también induce sobre la salud cardiovascular”.

Por otra parte, el portal web de la Fundación Carlos Slim aseguró que la memoria también esta relacionada con la dieta y los alimentos que se consumen con frecuencia. “Tener buena memoria depende en el total de células cerebrales, la conexión entre estas y su salud”, aseguró Joy Bauer, experta en ciencias de la nutrición. La especialista menciona algunos alimentos que pueden ayudar a mejorar la memoria o a evitar un eventual deterioro de la misma.

La alimentación influye de manera directa en la salud del cerebro. | Foto: Gettyimages
  • Remolacha: se cree que esta verdura ayuda a mejorar la circulación sanguínea. Es importante mencionar que al envejecer, ciertas áreas del cerebro no reciben un flujo sanguíneo adecuado, lo que se relaciona con problemas de memoria y la aparición de demencia, entre otros trastornos cognitivos.
  • “Toda célula en el cuerpo necesita una provisión continua de oxígeno y nutrientes para permanecer viva y funcionar correctamente”, indicó Bauer. “Un cerebro lleno de neuronas bien nutridas te permite pensar y recordar más claramente”, aseguró.
  • Proteínas magras (sin grasa): el consumo de este tipo de proteínas ayuda a mejorar las habilidades cognitivas. La pechuga de pollo y de pavo, los huevos y la leche baja en grasa son excelentes fuentes de vitamina B12, que es una proteína importante para mantener las habilidades cognitivas.
  • Según un estudio elaborado por investigadores de la Universidad Tufts, en Estados Unidos, los adultos mayores que presentan niveles bajos de este componente tienen un mayor riesgo de presentar deterioro mental.
Los frutos rojos son buenos para la salud del cerebro, ya que ayudan a prevenir el deterioro celular. | Foto: Getty Images
  • Frutas silvestres: los frutos rojos son muy ricos en antioxidantes que ayudan a prevenir el deterioro de las células cerebrales. De acuerdo con un estudio elaborado por investigadores de la Universidad de Harvard, en Estados Unidos, las mujeres que consumen al menos una taza de moras y fresas a la semana experimentan un retraso de 2,5 años en deterioro mental, en comparación con mujeres que no las consumen.
  • Pescado: “cuando se trata de comida y memoria, el pescado puede ser la estrella”, expresó Bauer. Principalmente se recomienda el consumo de pescados como el salmón, las sardinas y el arenque, que contienen buenas cantidades de omega-3, el cual es importante para mantener la salud de las células cerebrales.
  • Nueces: un estudio publicado en el Diario de la Enfermedad de Alzheimer, aseguró que el consumo de estos frutos secos está relacionado con la memoria, las funciones cognitivas y, en general, una adecuada salud mental.

¿Qué es una dieta mediterránea?

Esta dieta incluye muchos vegetales, frutas, legumbres, cereales y productos ricos en carbohidratos saludables como el pan, la pasta y el arroz integral. También contiene cantidades moderadas de pescado, carnes magras blancas y algunos productos lácteos. En esta dieta se usa para cocinar el aceite de oliva extravirgen.