Aunque las vitaminas son indispensables para la salud del cuerpo, su alto consumo puede ser perjudicial para el mismo.
Es de mencionar que aunque se dice que su ingesta puede ser probablemente favorable para contrarrestar enfermedades cardiacas, la Clínica Mayo señala que ninguna vitamina puede prevenir el desarrollo de un problema en el corazón.
Esto se debe a que las vitaminas de por sí no pueden contrarrestar enfermedades, pero quizá, acompañadas de una dieta balanceada -rica en frutas y verduras- junto con una rutina de ejercicio, pueden mitigar el riesgo de padecerlas, tales como la diabetes o el colesterol alto.
- Colesterol alto: la entidad lo describe como “una sustancia cerosa” que se adhiere a las arterias e impide el paso de la sangre.
- Diabetes: es una enfermedad en la cual el páncreas no produce insulina y/o las células se resisten a ella. Se conocen tres clases: el tipo I, el tipo II y la gestacional.
“La Asociación Americana del Corazón no recomienda tomar ninguna de esas vitaminas como forma de prevenir una enfermedad cardíaca”, asegura.
La vitamina C
Tua Saúde señala que la vitamina C es un antioxidante que puede combatir varias enfermedades y estimular la producción de colágeno, la proteína que le da firmeza a la piel.
Asimismo, esta vitamina se puede encontrar en frutas como la naranja, el limón, las fresas y otros alimentos que ayudan al organismo para su buen funcionamiento. Sin embargo, se recomienda consultar con un nutricionista porque su ausencia puede traer complicaciones en la estructura ósea.
Una de las características más destacadas de la vitamina C es que presuntamente puede reducir el riesgo de contraer enfermedades cardíacas, no obstante, la entidad no asegura esto porque no existen estudios que sustenten dicha premisa.
Además, explica que no puede haber una sobredosis de vitamina C luego del consumo de la misma, pero si se hace por suplementos, lo anterior sí puede provocar vómito y diarrea.
No obstante, el consumo de vitamina C es primordial para la salud del cuerpo porque ayuda en la absorción del hierro, evitando la aparición de anemia. Cabe mencionar que, el cuerpo no la produce y, por ende, se obtiene tras la ingesta de algunos alimentos.
La vitamina D
A diferencia de la vitamina C, el estreñimiento, la deshidratación, la fatiga, la irritabilidad, entre otros, son los síntomas más comunes de esta hipervitaminosis.
Asimismo, las complicaciones del consumo diario en altas dosis, puede ocasionar daños renales, cálculos, y deshidratación, por ejemplo.
Aunque el consumo alto de vitaminas no solo puede ser perjudicial para la salud, el de laxantes también puede desarrollar otras afecciones y hasta dejar en coma a una persona.
¿Qué le pasa al cuerpo si se consume mucha vitamina?
De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, Medline Plus, el consumo alto de vitaminas puede provocar una sobredosis de las mismas que ocurre, ya sea de manera intencional o accidental.
“Las vitaminas son sustancias orgánicas presentes en cantidades muy pequeñas en los alimentos, pero necesarias para el metabolismo”, explica la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, señalando que son tan esenciales que su carencia puede desarrollar enfermedades.
Antes de continuar, si se observa un exceso de vitaminas, se recomienda de inmediato dirigirse a un centro médico, para estar bajo supervisión y contrarrestar posibles complicaciones.
La entidad de investigación señala que cualquier vitamina en exceso puede ser perjudicial para la salud, pero se cree que el hierro y el calcio son altamente nocivos, así como la vitamina A o la vitamina D.
Los principales síntomas que experimenta una persona con sobredosis de vitamina pueden ser diarrea o vómito, sin embargo, los signos de alerta van acorde al producto que se consumió.