La salud es uno de los temas más consultados en los escenarios web, pues contar con un buen organismo es un requisito innegociable para llevar un buen estilo de vida.
Sin embargo, no todos los organismo son iguales, lo que significa que hay signos o síntomas que prevalecen en algunas personas más que en otras.
En ese sentido, usualmente, entre los síntomas más recurrentes se encuentra la inflamación en los intestinos; esta complicación puede deberse a factores genéticos, inmunitarios o ambientales.
De acuerdo con la organización Kids Health, la enfermedad inflamatoria intestinal suele ser heredada, pero eso no quiere decir que siempre sea diagnosticada por antecedentes familiares, sino que el aval médico tiende a variar y puede ocurrir a cualquier edad.
Por lo general, para determinar la compilación en la digestión, se lleva a cabo una análisis de las heces, al igual que se realizan radiografías y otros procedimientos como una colonoscopia.
Los expertos comparten que el cuadro sintomatológico de la enfermedad inflamatoria intestinal es: dolor abdominal y diarrea, aunque también se presentan casos con sangre en el inodoro, en el papel higiénico o en las heces, fiebre, falta de energía y pérdida de peso.
“La enfermedad inflamatoria intestinal puede causar otros problemas, tales como erupciones, afecciones oculares, dolor articular, artritis y problemas hepáticos. Los niños quizá no crezcan tanto como otros de su edad y pueden ingresar más tarde en la pubertad”, advierte la citada organización.
En ese orden de ideas, evitar o tratar dicha enfermedad es sinónimo de conservar la vida. Para ello, existen varias alternativas como los medicamentos, las dietas alimenticias o una intervención quirúrgica.
No obstante, a lo anterior también se suman los denominados remedios naturales, los cuales provienen de las creencias populares y el conocimiento ancestral.
Cabe decir que antes de considerar efectuar alguna de las siguientes recetas naturales para desinflamar los intestinos de manera rápida, lo mejor es consultar con médicos y especialistas en el asunto.
Así las cosas, teniendo en cuenta recopilaciones del blog UnCómo, la forma más sencilla y rápida para mejorar la inflación de los intestinos de manera natural es con la preparación de diferentes tés que, por sus propiedades, resultan siendo efectivos en el organismo de las personas.
Los tés más populares para ayudar a los intestinos
Lo primordial que busca una persona con la ingesta de algunos de los siguientes tés es disminuir el dolor, ya que la inflamación intestinal puede ser desesperante; luego de ello, la hinchazón irá bajando, según los conocedores del tema.
A continuación, la lista de los tres tés infaltables para desinflamar los intestinos en tiempo récord:
1. Té de menta y anís
La menta es de las plantas más utilizadas para desinflamar el colón, mientras que el anís “contribuirá a reducir la hinchazón del intestino, ya que es un potente antiinflamatorio y reduce los espasmos estomacales”, consigna UnCómo.
- Ingredientes: una cucharada de anís, 10 gramos de hojas de menta y 250 mililitros de agua.
- Preparación: hervir el agua y añadir las hojas de menta y el anís, luego dejar reposar durante 10 minutos y, por último, colar el líquido e ingerir la infusión en ayunas.
2. Té de manzanilla
Por años, la manzanilla ha liderado la lista de los remedios naturales. La razón de ello es debido a que se caracteriza por tener propiedades antiinflamatorias, antibacterianas y relajantes.
- Ingredientes: una cucharada de flores de manzanilla o una bolsita de manzanilla para infusión.
- Preparación: hervir 250 mililitros de agua, después añadir la manzanilla y, para terminar, dejar reposar por 10 minutos para ser consumida en cualquier hora del día.
3. Té de cardamomo
El citado portal detalla que las semillas de cardamomo tienen un aceite esencial y este es el que permite “estimular el proceso de digestión, mientras ayuda a eliminar los gases”.
- Ingredientes: cuatro semillas de cardamomo y medio litro de agua.
- Preparación: poner a hervir el agua y agregar las semillas, luego dejar en punto de ebullición durante tres minutos y, por último, dejar enfriar para que la mezcla se concentre. Al momento de tomar el té, volverlo a calentar.