La menopausia es la época de la vida de una mujer en la cual deja de tener menstruaciones y suele ocurrir naturalmente, con mayor frecuencia después de los 45 años, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Además explicó que los cambios y los síntomas pueden empezar varios años antes e incluyen:

  • Cambio en las menstruaciones: Más o menos duraderas, más o menos profusas, con más o menos tiempo entre los períodos.
  • Dificultad para dormir.
  • Sequedad vaginal.
  • Cambios de humor.
  • Dificultad para concentrarse.
  • Menos cabello y más vello facial.

Adicional, un estudio publicado por la revista Arthritis Care Research, citado por el portal Cuerpo Mente, señaló que “las mujeres después de la menopausia tienen el doble de riesgo de desarrollar artritis reumatoide seronegativa. Por el contrario, el riesgo no aumenta para la artritis reumatoide seropositiva”.

Por ello, para prevenir la artritis después de la menopausia se debe:

  • Mantener un peso saludable: el Ministerio de Salud en su página web explicó que se considera un peso saludable aquel que permite que la persona se mantenga en un buen estado de salud y calidad de vida. También se entiende como los valores de peso, dentro de los cuales, no existe riesgo para la salud de la persona.

Además, indicó que para saber si una persona está en un peso saludable, existen algunos métodos confiables. Uno es la determinación del Índice de masa corporal (IMC), que describe la relación entre peso y estatura y para calcular el IMC se necesita conocer el peso y la estatura y se aplica una sencilla fórmula matemática que consiste en dividir el peso entre la estatura al cuadrado: IMC = Peso (Kg) / Estatura al cuadrado (Mt).

Ejemplo:

Una persona pesa 64 Kg y mide 1.5 metros: 64 / 1.5 x 1.5 = 28.44. Este dato indica el IMC de la persona (28.44) se encuentra en los valores correspondientes a sobrepeso.

Esta formula no aplica a mujeres en estado de embarazo y debe ser ajustada si la persona tiene algún grado de edema (retención de líquido ).

Criterios de evaluación del IMC:

Si el IMC es inferior a 18.5, está dentro de los valores correspondientes a “delgadez o bajo peso”.

Si el IMC es entre 18.5 y 24.9, está dentro de los valores “normales” o de peso saludable.

Si el IMC es entre 25.0 y 29.9, está dentro de los valores correspondientes a “sobrepeso”.

Si el IMC es 30.0 o superior, está dentro de los valores de “obesidad”.

  • Hacer ejercicio: la recomendación es hacer al menos 150 minutos de actividad aeróbica moderada o 75 minutos de actividad aeróbica intensa a la semana, o una combinación de actividad moderada e intensa, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), pues esto aumenta el flujo sanguíneo al cuerpo entero. No obstante, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por su siglas en inglés) revelaron que para tratar la afección se deben realizar ejercicios que no impliquen esforzar las articulaciones y se deben escoger actividades que no las recarguen, como caminar, andar en bicicleta, bailar o hacer ejercicios aeróbicos en el agua.
  • Tener una dieta saludable: esta debe incluir al menos 400 g (o sea, cinco porciones) de frutas y hortalizas al día, menos del 10 % de la ingesta calórica total de azúcares libres, menos del 30 % de la ingesta calórica diaria procedente de grasas y menos de cinco gramos de sal (aproximadamente una cucharadita) al día y la sal debería ser yodada.
  • No fumar: las personas que fuman durante un período prolongado corren un mayor riesgo de tener artritis reumatoide.