La enfermedad por reflujo gastroesofágico se produce cuando el ácido del estómago fluye con frecuencia hacia el tubo que conecta la boca con el estómago (esófago) y muchas personas lo tienen periódicamente, de acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.

De acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, los síntomas de la acidez de estómago incluyen:

  • Un dolor ardiente en el pecho que generalmente se presenta después de comer y puede ocurrir durante las horas de la noche.
  • Dolor que empeora al acostarse o inclinarse.
  • Sabor amargo o ácido en la boca.

Sin embargo, es importante consultar a un especialista de la salud cuando la acidez estomacal se produce más de dos veces por semana y los síntomas persisten a pesar del uso de medicamentos de venta libre, si tiene dificultad para tragar, si tiene náuseas o vómitos persistentes o si pierde peso porque tiene poco apetito o dificultad para comer. Además, si tiene otros síntomas, como un dolor opresivo en el pecho, podría tratarse de un infarto (ataque al corazón).

Por tal razón, el portal portugués de salud, nutrición y bienestar Tua Saúde reveló que existen algunos remedios naturales que ayudan con el reflujo gastroesofágico como, por ejemplo, beber 1/2 vaso de agua con una cucharada de jugo de limón antes de las comidas y en ayunas, ya que este alimento es alcalino y neutraliza los ácidos estomacales y las molestias.

La segunda bebida es el té de jengibre y se deben agregar 2 cucharadas de jengibre rallado en 1 litro de agua fría y esto se debe consumir en el transcurso del día, porque tiene propiedades que “estimulan la producción de enzimas por parte del sistema digestivo”.

La siguiente recomendación es tomar bicarbonato con agua, pues esta bebida ayuda a disminuir la acidez del estómago. No obstante, Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, recomendó no usar bicarbonato de sodio por más de dos semanas a menos que un médico lo indique y señaló en su página web que no hay que administrar bicarbonato de sodio a niños menores de 12 años de edad.

La cuarta sugerencia es tomar té de manzanilla, porque esta tiene propiedades calmantes y lo ideal es consumir entre 2 o 3 al día y la última recomendación es tomar jugo de sábila, ya que trata el dolor y la acidez.

Sobre la misma línea, los expertos recomiendan algunos alimentos como la avena, el jengibre, la papaya, la manzana o los plátanos para prevenir esta afección, pues tienen beneficios para la salud digestiva y funcionan como antiinflamatorios.

Adicional, hay otros cambios que podrían evitar el reflujo, pues la biblioteca también recomendó dormir con la cabeza levantada, pues dormir con la cabeza a un nivel más alto que el estómago reduce la posibilidad de que los alimentos digeridos se devuelvan al esófago. “Colocar libros, ladrillos o bloques de manera segura debajo de las patas de la cama en la parte de la cabecera. También se puede usar una almohada en forma de cuña debajo del colchón. Dormir con almohadas extra no funciona bien para aliviar el reflujo o la acidez, debido a que las almohadas se pueden resbalar durante la noche”, explicó Medline Plus.

También es bueno reducir el estrés e intentar practicar yoga o meditación para ayudar a la relajación, pues esto es otro causante de la acidez estomacal.

Hay que señalar que el embarazo, las bebidas alcohólicas, algunas medicinas y algunos alimentos como comidas picantes, cebollas, productos cítricos, productos a base de tomate, como la salsa de tomate, alimentos fritos o grasos, menta, chocolate, bebidas carbonatadas, café u otras bebidas con cafeína, comidas abundantes o grasas pueden provocar acidez. Por tal razón, es mejor evitar los alimentos que puedan desencadenar el reflujo.