De acuerdo con la Clínica Mayo, las venas varicosas “son venas retorcidas y agrandadas” que aparecen porque una persona está de pie por un prolongado tiempo, o tal vez, camina largas distancias.
Las arañas vasculares o las venas varices, como también se les denomina, para algunas personas son molestas por el dolor que les produce; para otras, su aspecto físico es el que se ve afectado.
Entre los síntomas que se conocen de las venas varices se encuentran: ardor intenso, hinchazón en la zona, comezón y un cambio de color en el área donde estas aparecen.
Una persona puede ser propensa a su aparición porque cumple con alguno de los siguientes ítems:
- Embarazo: cuando una mujer se encuentra en este estado, sus piernas se hinchan porque “el volumen sanguíneo del cuerpo aumenta”, asegura la entidad americana.
- Obesidad: la Organización Mundial para la Salud (OMS) asegura que la obesidad o el sobrepeso son la acumulación de grasa en el cuerpo, por lo que este hace mayor presión en las venas.
- La postura: tal y como se indicó, estar periodos prolongados en una sola posición, perjudica la salud, por ejemplo, estar sentado o de pie por mucho tiempo.
- El género femenino: aunque los hombres pueden observar cómo aparecen estas venas en sus piernas, las mujeres son más propensas a desarrollarlas por los cambios hormonales que experimentan.
¿Cómo prevenir las venas varices?
El cambio de hábitos es la mejor solución para prevenir la aparición de estas venas que son incómodas para muchos, por lo que las siguientes actividades ayudan a mejorar la circulación sanguínea:
- Realizar ejercicio: tener rutinas físicas hacen parte de la salud mental y física de una persona. Es entonces, que también colaboran en reducir las posibilidades de la aparición de venas várices.
- Dieta balanceada: como se indicó anteriormente, tener una alimentación inadecuada aumenta el peso, y así, las probabilidades de desarrollar afecciones que impactan el organismo, por lo que se recomienda tener un plan de alimentación equilibrado, supervisado por un profesional de la salud.
- No usar zapatos altos: los tacones y las medias que aprietan las piernas no son las más convenientes porque impiden un óptimo flujo sanguíneo.
No se pueden omitir las consecuencias que tienen las venas várices cuando no son tratadas, por lo que se aconseja consultar con un médico o un experto para contrarrestar esta afección que puede ser inofensiva en algunos casos, pero en otros no.
Unas venas várices que no son tratadas pueden ocasionar coágulos provocando inflamación en la zona. En algunos otros, estas estallan -asegura la entidad americana-, por lo que deben ser atendidas por un profesional de la salud. Además, pueden ocasionar llagas, o úlceras que producen dolores intensos.
El ajo y las venas varices
Tal y como lo señala un artículo publicado por Tua Saúde y revisado por la nutricionista Tatiana Zanin, el ajo es un alimento que tiene propiedades antiinflamatorios y antimicrobianos, que es usado tanto en la cocina como en la medicina porque ayuda a combatir bacterias, proteger el corazón y hasta mantener la salud de las neuronas del cerebro, gracias a los antioxidantes que lo componen, que eliminan los radicales libres que deterioran las células del cuerpo.
Es por esto que puede ser usado en el tratamiento contra las venas várices, que junto al zumo de naranja ayuda a mejorar la circulación.
Modo de preparación
- En un frasco agregar cuatro dientes de ajo bien machacados.
- Incorporar al mismo recipiente el zumo de tres naranjas.
- Añadir dos cucharadas de aceite de oliva.
- Tapar y dejar reposar por al menos 12 horas.