El dolor es uno de los síntomas principales de muchos problemas músculoesqueléticos. Sin embargo, el óseo es menos común que el muscular y el articular.

Alexandra Villa-Forte, médica de Cleveland Clinic, señala que la causa del dolor musculoesquelético puede ser un trastorno óseo, articular o muscular; una lesión de los tendones, los ligamentos o de las bolsas sinoviales, o una combinación de estos. Los traumatismos son la causa más frecuente de dolor.

Entre los traumatismos está la artrosis, un proceso degenerativo de desgaste del cartílago, que afecta sobre todo a las articulaciones que soportan más peso, o que tienen exceso de movimiento, como por ejemplo las caderas, las rodillas o las manos, según el portal de salud Cuídate Plus.

El magacín Medical News Today señala que también está la osteoporosis, la cual es una enfermedad de “huesos porosos”. Es más común en adultos mayores, como resultado de una deficiencia de calcio y vitamina D. Otras causas incluyen hipertiroidismo, menopausia y antecedentes familiares.

La Fundación Internacional de Osteoporosis establece que 1 de cada 3 mujeres y 1 de cada 5 hombres mayores de 50 años experimentarán una fractura de hueso debido a la osteoporosis.

El aceite de bacalao se ha usado durante muchos años para tratar la artrosis, | Foto: Foto: Getty Images.

Remedios caseros para los dolores en los huesos

Ortiga

La ortiga tiene propiedades diuréticas que ayudan a desinflamar las zonas afectadas por dolor articular o de huesos, según estudio realizado por la Universidad Isfahan (Irán).

Ingredientes:

  • 1 cucharada de hojas de ortiga (15 gramos).
  • 1 taza de agua (250 mililitros).

Preparación:

  • Calentar el agua y, cuando llegue a ebullición, añadir la ortiga.
  • Dejar que repose durante 10 minutos, colar y beber la infusión.
  • Se recomienda beber dos tazas al día para ayudar a la circulación de la sangre.

Jengibre

El jengibre es una raíz con propiedades analgésicas y antinflamatorias que puede ayudar a reducir el dolor causado por enfermedades óseas como la artritis. De hecho, según un estudio realizado por la Universidad Qazvin (Irán), es igual de efectivo que el ibuprofeno.

Aceite de bacalao

  • Este aceite se ha usado durante muchos años para tratar la artrosis, una enfermedad crónica que afecta la superficie de las articulaciones (las desgasta) y provoca dolor de huesos cuando estos se rozan.
  • Esto se debe a su alto contenido en ácidos grasos omega-3, encargados, según un estudio sobre la desinflamación realizado por la Universidad de Chile.

Vitamina D

  • La vitamina D favorece la absorción del calcio por lo que ayuda a la mineralización de los huesos. Además, el dolor de huesos, puede ayudar a los pacientes que sufren osteoporosis.
  • Por un lado, mejorar la salud esquelética permite reducir el riesgo de fracturas y, en consecuencia, el posible dolor.
  • De acuerdo a una investigación reciente publicada en el International Journal of Molecular Sciences, dicha vitamina también tiene la capacidad de disminuir el dolor entre aquellas personas que presentan cierta deficiencia previa de este micronutriente.
  • Entre los alimentos naturales que aportan vitamina D destacan los pescados azules. El pescado azul contiene entre un 2 y un 5 % de grasa y una buena cantidad de proteínas.
  • Los pescados más recomendados son: caballa, sardinas y salmón.

Aceites esenciales

  • Algunos aceites esenciales han demostrado mejorar determinadas propiedades óseas. De esta manera, su aplicación puede mejorar la densidad mineral y prevenir la inflamación y el estrés oxidativo, según el portal Mejor con Salud.
  • Por esto su aplicación tópica en forma de masajes podría ayudar a mejorar el dolor en caso de fracturas y traumatismos al reducir la inflamación.
  • Los más usados para este fin son los de tomillo, canela, jengibre o romero. Para aplicarlos es necesario diluirlos en algún vehículo portador como aceite de almendras, de coco o de oliva.