Una de las afecciones más comunes en la actualidad es tener los niveles de colesterol en valores poco saludables. Las personas no le prestan gran atención a esta sustancia en el organismo y muchos no conocen que se altera por frecuentar malos hábitos.
Pues bien, el colesterol eleva sus niveles cuando se lleva una insana alimentación en la que resalta el consumo de productos cargados de grasas dañinas, azúcar y sodio. Asimismo, el no realizar actividad física de forma regular también incrementa estos valores negativos.
Como se puede deducir, una de las alternativas para disminuir y mantener controlados los niveles de colesterol es fijar una dieta alimenticia saludable en la que se priorice la ingesta de elementos de origen natural como, por ejemplo, las frutas y las verduras. Adicional a esto, los profesionales de la salud recomiendan practicar ejercicio mínimo tres veces a la semana.
De igual manera, es oportuno hacer hincapié que otra de las opciones para ‘barrer’ el colesterol alto y malo es bebiendo algunos remedios naturales. Y, precisamente, uno de ellos es el que se prepara con cebada.
De acuerdo con el portal especializado Mejor con Salud, la cebada “disminuye las posibilidades de que se formen coágulos de sangre en las arterias, gracias a que evita las síntesis los tromboxanos, unas sustancias que participan activamente en la formación de coágulos”. Y “estimula la reducción del colesterol malo (LDL), ya que mejora la actividad celular para evitar la oxidación de las grasas”.
Así se prepara este remedio. Se debe hervir durante 10 minutos 1 taza de cebada (unos 150 gramos) en 6 tazas de agua (1,5 litros). Después de este tiempo se debe cambiar el agua por la misma cantidad y deja reposar la mezcla. Cuando se vaya a tomar, añadir un endulzante natural y el jugo de un limón.
Beneficios del agua de cebada
1. Perder peso: esta bebida tienen un alto contenido de fibra, lo que ayuda a regular la digestión y sentir saciedad. Si se combina con ejercicio y una alimentación saludable, el consumo de esta agua puede ayudar adelgazar, ya que además de los beneficios anteriores, destaca porque se digiere lentamente.
2. Controla el azúcar en la sangre: ayuda a aumentar la cantidad de bacterias prevotella en el intestino, las cuales son beneficiosas porque ayudan a reducir los niveles de azúcar en sangre hasta por 11 a 14 horas. Es importante mantener los niveles de azúcar en sangre bajo control, ya que así se puede reducir el riesgo de diabetes tipo 2. A su vez, el agua de cebada sin azúcar puede ayudar a quienes sufren de diabetes a controlar los niveles de glucosa en sangre.
3. Útil para los bebes: suele darse un poco de agua de cebada a los bebés que andan con cólicos estomacales, puesto que tiene propiedades astringentes y no es perjudicial.
4. Previene la arterioesclerosis: gracias a su contenido de fósforo, calcio y cobre la hacen un remedio casero muy efectivo para mejorar y mantener la salud de los huesos.
5. Aumenta la función inmune: la proteína en una porción de cebada de 3,5 g ayuda a reforzar la función del sistema inmunológico. El zinc en la cebada también ayuda al cuerpo a combatir infecciones, ya que sin lo suficiente en el plan de comidas, puedes experimentar el padecimiento de infecciones con más frecuencia. Una porción de cebada ofrece 1,3 miligramos de zinc, una porción del 8 al 11 miligramos recomendada para consumo diario.
Contraindicaciones del agua cebada
- Algunos componentes del agua de cebada pueden traer varias consecuencias. Debido a su alto contenido de fibra; puede ocasionar flatulencias, gases, hinchazón abdominal o calambres estomacales.
- Algunas recetas para elaborarla de forma casera y marcas comerciales, contienen entre sus ingredientes elevadas cantidades de azúcar u otros edulcorantes. Es fundamental revisar bien las etiquetas antes de elegir cualquier bebida.
- Para el consumo de esta bebida, es esencial filtrar muy bien el agua que se va a utilizar para no limitar su ingesta.
- Los granos de cebada son uno de los cereales que contienen gluten, por ende, su consumo está contraindicado en aquellas personas que padecen celiaquía.
- El consumo de cebada (se incluye también máchica y café de cebada) podría causar una reacción alérgica en personas que son hipersensibles. La cebada es un alérgeno clave en la condición de asma del panadero y también una proteína de endosperma de cebada.
- La cebada podría reducir los niveles de azúcar en la sangre en gran medida en aquellas personas que ya están tomando medicamentos para la diabetes. Por ello, podría ser peligroso su consumo en estos casos.
- El grano de cebada puede causar una alergia respiratoria grave llamada ‘Panaderos asma’ en la gente que trabaja en las panaderías. Pero también se puede caer presa de él si se está expuesto a un montón de harina de cebada, mientras que la preparación de su agua de cebada.
- Al estar cargada con fibra, la cebada puede dañar el esófago también. Siempre que preparar su bebida, asegurarse de agregar suficiente agua para el extracto de malta. De lo contrario, se puede enfrentar dificultades para tragar, lo que eventualmente puede bloquear o incluso la ruptura del esófago.
- La enfermedad celíaca es básicamente alergia al trigo, que es causada debido a la intolerancia al gluten. La cebada contiene una gran cantidad de gluten, con lo que la condición aún peor.
- En caso severo de estreñimiento, es posible que experimente sangrado rectal con dolor agudo. Trate de evitar el consumo de este laxante natural en cantidad a granel para evitar este tipo de situaciones.
- Al ser una fibra dietética soluble, cebada hace que el gas intestinal o flatos salga con frecuencia. La razón detrás de esto es la actividad de las bacterias beneficiosas presentes en nuestro colon. Por lo tanto, tratar de limitar su consumo de agua de cebada a evitar la formación de gas.
A manera de conclusión, es importante señalar que el agua de cebada también puede provocar algunos inconvenientes. Por ejemplo, algunos expertos recomiendan no consumirla si también estás siguiendo un tratamiento farmacológico, pues la mezcla puede irritar el estómago y provocar síntomas como hinchazón, dolor o calambres.