De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, el color amarillento en las uñas, así como el engrosamiento de las mismas, se atribuye a factores tanto internos como externos. Por este motivo, antes de intentar cualquier tratamiento es importante acudir a un especialista médico para recibir un diagnóstico y acompañamiento adecuados.

Esta condición se presenta con el llamado síndrome de las uñas amarillas, el cual se caracteriza por el engrosamiento y una decoloración en las uñas, las cuales adquieren una tonalidad entre amarilla y amarillo-verdosa. Esta afección, incluso, es asociada al linfedema (inflamación debido a obstrucción del sistema linfático).

La Clínica Mayo agrega que las uñas afectadas con este síndrome pueden perder la cutícula y desprenderse del lecho ungueal en algunas partes, además, en general, puede ser un signo de una enfermedad respiratoria, como la bronquitis crónica.

Es importante precisar que el síndrome de las uñas amarillas no es igual a la onicomicosis (hongos), la cual es más frecuente y presenta algunos síntomas similares, como el engrosamiento y decoloración de las uñas. Al respecto, la Clínica Mayo reseña que -si la enfermedad producida por hongos es leve- no es necesario recibir tratamiento. En caso contrario, existen medidas de cuidado personal y medicamentos que podrían ayudar a reducir la infección. Sin embargo, anota que los hongos son difíciles de eliminar y, generalmente, regresan.

En todo caso, las uñas amarillas, además de ser signos potenciales de algún tipo de enfermedad (por lo que conviene acudir a un doctor para despejar las dudas), se configuran como detalle estético con el que no todas las personas se sienten cómodas. En esa línea, constantemente buscan remedios caseros o tratamientos que las ayuden a recuperar su color natural.

De acuerdo un artículo publicado en el portal Mejor con salud, otras de las causas para el amarillamiento de las uñas es la poca disponibilidad de vitaminas A y B en el organismo, además de posibles afecciones hepáticas como la hepatitis. Por otro lado, menciona factores externos como el consumo de tabaco, ya que sostener el cigarrillo con la mano hace que las uñas se manchen de nicotina o el uso de algunos productos de baja calidad para esta parte del cuerpo, como esmaltes o uñas postizas.

¿Existen remedios caseros?

El portal citado menciona algunos tratamientos naturales que podrían ayudar a que las uñas recuperen su aspecto natural, sin embargo, aclara que su éxito depende de la condición específica de cada persona, por lo que reitera el llamado a recibir asesoría médica antes de intentar cualquier remedio.

En primer lugar, Mejor con salud destaca el jugo de limón como uno de los remedios caseros por excelencia para mejorar las uñas tanto de pies como de manos. El ácido nítrico de esta fruta ayudaría a exfoliar la superficie de las uñas y a combatir los hongos.

Modo de aplicación: basta con sumergir las uñas en jugo de limón durante cinco a diez minutos. Luego de que haya pasado el tiempo recomendado, se deben lavar las manos con agua y jabón. El tratamiento puede realizarse diariamente.

Otra manera de usar el limón para recuperar el color natural de las uñas es a manera de aceite esencial, el cual está disponible en tiendas naturistas. Este producto, además de limpiar las uñas, también hidrata las cutículas.

Por otra parte, el agua oxigenada también es descrita como un remedio natural para reparar las uñas, especialmente si se trata de una infección por hongos. El modo de uso es bastante sencillo, solo se deben aplicar unas gotas en cada uña durante un par de semanas y esperar que actúe contra la infección.

El bicarbonato de sodio es otra receta popular dentro de la medicina natural. En este caso, ayudaría a que las uñas vuelvan a lucir transparentes. Para aplicarlo, primero debe mezclarse con agua, posteriormente, con un cepillo, se frota en cada uña, se deja actuar durante algunos minutos y se exfolia suavemente.

Finalmente, el portal Mejor con salud menciona una mezcla de aceite de oliva, bicarbonato y limón, la cual serviría para mejorar el color de las uñas, además de fortalecerlas. Para aplicarla, solo se deben unir todos los ingredientes en un recipiente y, luego de revolverlos, se frota cada uña con la pasta resultante.

Por supuesto, vale la pena recordar que los remedios descritos previamente corresponden a recetas de medicina natural y su eficacia varía de acuerdo a la condición de cada persona. Por eso, es recomendable, en primer lugar, acudir a un especialista médico para recibir una orientación más precisa.