Según el portal de la Biblioteca de salud y medicina de los Estados Unidos, MedlinePlus, los forúnculos son una infección que afecta a grupos de folículos pilosos y tejidos cutáneos adyacentes. En la mayoría de los casos, este problema es causado por las bacterias Staphylococcus aureus, pero también puede ser provocado por otras bacterias y hongos que se encuentran en la superficie de la piel.

Este problema puede aparecer en cualquier parte del cuerpo, sin embargo, algunas zonas son más propensas a padecerlo. Las zonas más comunes son la cara, el cuello, la axila, las nalgas y los muslos, estas afecciones suelen aparecer una vez, pero en algunos pacientes pueden volverse crónicos.

El portal de salud, belleza y cuidado personal Tua Saúde brinda la lista de unos remedios caseros que pueden tratar y prevenir esta afección. Antes de emplearlos es pertinente contar con la aprobación de un profesional de la salud.

Remedios caseros para tratar forúnculos naturalmente

Compresa de calabaza

Ingredientes:

  • 50 g de calabaza.
  • Gasas esterilizadas.

Preparación:

  • Lo primero que se debe hacer es retirar la cáscara de la calabaza y cocinar la pulpa.
  • Estando tibia se debe colocar la pulpa sobre una gasa esterilizada, para luego colocarla sobre el forúnculo durante 20 minutos, 2 veces al día.

Compresa de cebolla

Ingredientes:

  • 1 cebolla.
  • Gasas esterilizadas.

Preparación:

  • Rallar la cebolla cruda y colocarla en una compresa o gasa y luego cubrir el forúnculo.
  • Dejar actuar durante 2 horas el remedio en la zona y cambiar la compresa 2 veces al día hasta que el forúnculo desaparezca.
La cebolla contiene quercetina y azufre por ende combate las bacterias que generan los forúnculos. | Foto: Getty Images

Té de limón

Ingredientes:

  • 10 g de hojas de limonero.
  • 1 limón.
  • 1 litro de agua.

Preparación

  • Colocar las hojas, el agua y el jugo del limón en una olla, dejar que hervir durante 5 minutos.

Tintura de altea

Ingredientes:

  • 1 cucharadita de raíces de altea.
  • Alcohol etílico.

Preparación

  • Colocar en un recipiente de vidrio las raíces de altea y cubrirlas con el alcohol.
  • Tapar bien la mezcla y dejarla reposar en un lugar fresco y seco hasta el día siguiente.
  • Después, aplicar la mezcla encima del forúnculo cada 2 a 3 horas, intentando retirar la secreción poco a poco.
  • Repetir este procedimiento varias veces al día hasta que el forúnculo desaparezca.
  • Según el medio el remedio casero puede guardarse y utilizarse hasta por 2 meses.

Compresa de ocumo blanco

Ingredientes:

  • 1 porción de ocumo blanco.
  • Gasas esterilizadas.

Preparación

  • Rallar la cantidad necesaria de ocumo blanco para cubrir el forúnculo.
  • Posteriormente, colocar la ralladura en una gasa esterilizada y cubrir el forúnculo.
  • Dejar actuar durante 1 hora y luego retirar lavando la región con agua tibia.
  • Repetir el procedimiento 4 veces al día.

Cataplasma de avena

Ingredientes:

  • 2 cucharaditas de avena en hojuelas o salvado.
  • 2 ml de aceite de copaiba.
  • 1 vaso de agua.

Preparación:

  • Llevar el agua a ebullición y reservar.
  • Añadir la avena en un recipiente de vidrio limpio y seco para luego añadir poco a poco el agua previamente hervida en este cereal para hidratarla, la idea es colocar la cantidad suficiente para que quede cubierta, mezclar hasta formar una especie de puré o papilla.
  • Añadir el aceite de copaiba, mezclar bien.
  • Dejar enfriar y aplicar el cataplasma sobre el forúnculo durante 10 a 20 minutos, 1 vez al día.
La avena está compuesta de fibras y vitaminas. | Foto: Getty Images

Pasta de linaza

Ingredientes:

  • ½ taza de harina de linaza.
  • Agua.
  • Gasas esterilizadas.

Preparación

  • Agregar la harina de linaza en un recipiente y añadir el agua fría poco a poco hasta formar una pasta.
  • Luego, colocar la pasta tibia sobre una gasa, formando una capa de aproximadamente 1 cm de espesor, y aplicar sobre el forúnculo de 1 a 3 veces al día.
Uno de remedios para los forúnculos es la linaza, que es la semilla de la planta Linum usitatissimum, la cual es usada para consumo humano, por ejemplo, en infusiones. | Foto: Getty Images