Las durezas o asperezas en los pies normalmente se les conoce como callos y técnicamente denomina hiperqueratosis. Este trastorno se caracteriza por engrosamiento de la capa externa de la piel, que está compuesta de queratina, una fuerte proteína protectora, según información de Mayo Clinic.

Normalmente, este problema puede producir algunos síntomas como sequedad, textura áspera al tacto, color amarillo por el cúmulo de queratina y piel endurecida en los bordes. Entre las causas más comunes de esta condición es pisar de manera incorrecta, ya que al no apoyar bien el pie, no se reparte correctamente la carga y la presión, por lo que algunas zonas se ven afectadas.

Adicional a ello, la deshidratación, los calcetines mal colocados y la deformidad de los pies también pueden ser una causal de la hiperqueratosis.

Para eliminar estas durezas, la revista especializada Mejor con Salud, explica algunos remedios caseros que ayudan a mantener unos pies libres de estas impurezas.

Aspirinas

Para realizar este remedio, en un recipiente se debe agregar una cucharada de zumo de limón y una porción de agua. Enseguida, disolver seis pastillas de aspirinas molidas y revolver bien hasta obtener una mezcla homogénea para aplicarla directamente en las zonas ásperas del pie.

Después de realizar esto, se debe cubrir la zona con una toalla y dejar actuar durante 30 minutos. Pasado este tiempo, enjuagar la zona con agua tibia y remover la piel muerta con ayuda de una piedra pómez. Finalmente, es importante secar adecuadamente los pies y repetir el procedimiento dos veces a la semana para ver mejores resultados.

Vinagre de manzana

En media taza de vinagre de manzana se debe remojar media rebanada de pan y aplicarlo sobre la piel dura del pie. Lo ideal es cubrir el área con un paño o toalla y dejarlo actuar durante toda la noche. Al día siguiente, humectar las zonas con una crema hidratante. Cabe mencionar que este remedio casero contiene propiedades antifúngicas que favorecen la piel.

Té de manzanilla

Para ablandar la piel áspera de los pies, se aconseja remojarlos en un recipiente con agua caliente que contenga cuatro sobres de té de manzanilla. Luego de 30 minutos, se debe restregar los talones con una piedra de pómez, para así remover la piel muerta. Es importante tener en cuenta que la manzanilla es una planta medicinal que se caracteriza por sus propiedades antiinflamatorias.

Bicarbonato de sodio

Al igual que el té de manzanilla, se debe agregar en un recipiente con agua caliente tres cucharadas de bicarbonato de sodio y luego sumergir los pies durante 10 minutos. Este remedio tiene un poder exfoliante muy efectivo para eliminar la piel muerta que se puede retirar poco a poco una lima.

Miel, azúcar y limón

La exfoliación con estos tres ingredientes es ideal para eliminar las impurezas que se alojan en la planta de los pies. En un vaso, integrar los ingredientes y mezclarlos hasta obtener una sustancia homogénea. Luego, aplicar en la zona cubriéndola con una bolsa plástica. Pasados 20 minutos retirar el producto y enjugar con abundante agua.

Aceite de oliva o vaselina

Solamente se debe introducir los pies en agua tibia, durante 20 minutos. Luego, proceder a secarlos correctamente y enseguida frotarlos con una piedra pómez. Enseguida, humedecer ambos pies con aceite de oliva o vaselina y colocarse los calcetines durante toda la noche.

Otras recomendaciones

Además de estos remedios caseros, se deben tener en cuenta las siguientes recomendaciones:

  • Utilizar zapatos cómodos que permitan una mayor respiración de la zona.
  • El uso de tacones demasiado altos no debe ser frecuente.