El colesterol es una grasa necesaria para el organismo y ayuda a formación de hormonas como los estrógenos y el cortisol, además, es importante en el proceso para sintetizar la vitamina D y es el principal componente de la bilis, pero cuando los niveles están muy altos, esta puede generar enfermedades cardiovasculares.

El aumento en los niveles de colesterol se pueden generar por malos hábitos dietéticos, una vida sedentaria, enfermedades hormonales o renales, un organismo que fabrica demasiado colesterol”, así lo explica el portal Saber vivir, sin importar la causa de un colesterol alto, las plantas medicinales se han convertido en una buena opción que puede controlarlo.

La alcachofa es una gran aliada para reducir el colesterol alto, pues tiene un efecto para frenar su formación en el hígado y facilita la eliminación a través de la bilis, indica Saber vivir.

“Preparar una decocción con una cucharada sopera rasa de las hojas, añadir zumo de limón y un poco de miel (ya que es muy amarga). Tomarla de 1 a 3 veces al día”, así lo aconseja el mencionado portal.

El té reduce la oxidación del colesterol y protege las arterias. Es diurético y ayuda a combatir la obesidad. La recomendación que hacen los expertos es beber de 1 a 3 infusiones preparadas con una cucharada sopera de sus hojas, explica Saber vivir.

El diente de león ayuda a la expulsión de bilis ricas en colesterol, “mejorando así el perfil lipídico. También es un potente diurético”, señala el mencionado sitio web. Para tomarla se necesita una cucharada sopera rasa de sus hojas, luego se hace una decocción y añadir miel; esta se puede tomar tres veces al día.

En el portal Tuasaúde destacan que estas bebidas para controlar el colesterol se deben consumir “bajo orientación médica o de un nutricionista, y no deben sustituir ningún tratamiento farmacológico”, además, su ingesta debe ser como un complemento para la medicación y la dieta que se usa en el proceso para bajar el colesterol.

Otra de las hierbas que ayuda a controlar los niveles de colesterol es la cúrcuma, la cual tiene un compuesto bioactivo llamado curcumina, que es una poderosa aliada para bajar los niveles de colesterol en la sangre por su acción antioxidante y ejerce un efecto cardioprotector.

En el sitio Tuasaúde indican que para la preparación se debe “colocar 1 cucharadita de polvo de cúrcuma en 150 mililitros de agua hirviendo y dejar reposar durante unos 10 minutos”. Esta bebida se puede consumir hasta 3 tazas al día entre las comidas.

La cúrcuma tiene algunas contraindicaciones: puede generar “obstrucción de las vías biliares debido a cálculos en la vesícula y en pacientes que estén tomando medicamentos anticoagulantes. En el embarazo o la lactancia sólo debe utilizarse bajo orientación médica”, señala Tuasaúde.

Té rojo que también es conocido como pu-erh, contiene antioxidantes y un compuesto llamado teobromina, la cual “se cree que aumenta la excreción a través de las heces del colesterol y alterando el metabolismo de las grasas”.

Hervir 1 litro de agua, añadir 2 cucharadas de té rojo y tapar durante 10 minutos. Luego se debe colar y beber 3 tazas al día, así lo aconseja el portal.

Esta bebida también tiene contraindicaciones: no lo deben tomar las mujeres embarazadas o durante la lactancia, tampoco es ideal para personas que sufren de “insomnio, gastritis, reflujo gastroesofágico, hipertensión o problemas cardíacos debido a que contiene cafeína”, aconseja Tuasaúde, además recomienda consultar con el médico antes de consumirlo.

Según el portal unCOMO, el laurel ayuda a reducir las grasas en el cuerpo lo que “se traduce en niveles de colesterol LDL y triglicéridos más bajos”. Para un buen tratamiento con esta bebida los expertos recomiendan beber 3 tazas al día para disfrutar de sus beneficios.

En este portal se aconseja que las mujeres en embarazo y la lactancia, niños menores de 12 años, no la deben beber, asimismo, no hay que “exceder la dosis para evitar malestar estomacal e indigestión”.