La retención de líquidos, también conocida como edema, es cuando se acumulan líquidos en los tejidos del cuerpo. Y aunque suele presentarse en los pies, los tobillos y las piernas, puede afectar todo el cuerpo.
De acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, las causas pueden ser: consumir demasiada sal, quemaduras de sol, insuficiencia cardíaca, enfermedades de los riñones, problemas hepáticos por cirrosis, embarazo, problemas con los ganglios linfáticos, especialmente después de una mastectomía, algunas medicinas, permanecer mucho tiempo de pie o sentado cuando hace calor.
Además, el tratamiento depende de la afección específica que esté causando el desequilibrio de líquidos.
Por tal razón, el sitio de noticias de estilo de vida Soy Carmín reveló que el jugo de piña con espinaca es ideal para eliminar la retención de líquidos, ya que la piña es diurética, antiinflamatoria y rejuvenecedora, y por cada 100 gramos de espinaca esta aporta 542 microgramos de vitamina A, 30 mg de vitamina C, 2 mg de vitamina E y 140 microgramos de ácido fólico.
En consecuencia, para obtener los beneficios se necesitan: media taza de piña, un rábano, tres hojas de espinaca, un limón y un tallo de brócoli. Después, se deben agregar todos los ingredientes a la licuadora para procesarlos y luego colarlos. Se bebe preferiblemente en ayunas.
Por su parte, existen algunos otros consejos que pueden ayudar a tratar la afección, como, por ejemplo, ingerir una dieta bien equilibrada, reducir la cantidad de sal, caminar o hacer otro tipo de ejercicio, ya que ayuda a que los líquidos vuelvan a bombearse al corazón. Además, cuando esté sentado o recostado, coloque la zona afectada en alto. Asimismo, evite estar de pie durante períodos prolongados o sentarse con las piernas cruzadas, según el sitio web informativo para pacientes de la American Society of Clinical Oncology (la Sociedad Estadounidense de Oncología Clínica, ASCO).
Asimismo, la fundación argentina Mundo Sano explicó que existen 4 tés que pueden ayudar con la afección.
1. Té verde: tiene una gran cantidad de polifenoles y vitaminas C, A y B, además de minerales como el zinc, selenio y magnesio.
2. Té de Jamaica: tiene altos porcentaje en vitamina C, antioxidantes, minerales omega, flavonoides, vitamina A, fenoles y antocianinas y fibra.
3. Té de perejil: solo dos cucharadas de perejil aportan el 2 % de calcio, hierro y ácido fólico que necesita el organismo a diario, el 12 % de vitamina A, el 16 % de vitamina C y más del 150 % de vitamina K, según reseña el diario español “AS”.
4. Té de cola de caballo: la cola de caballo se utiliza para tratar la retención de líquidos (edema), las infecciones de las vías urinarias, la pérdida del control de la vejiga (incontinencia urinaria), las heridas y muchas otras condiciones, aunque no existe buena evidencia científica para apoyar estos usos. Podría no ser seguro el uso de la cola de caballo, según Medline Plus.
De todos modos, antes de consumir algún medicamento o iniciar un tratamiento, lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guie el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona, ya que cuando la retención de líquidos no se trata a tiempo, puede implicar otros problemas como que la zona inflamada tienda a doler y dificultad para caminar. En la piel puede percibirse tirantez, irritabilidad y picazón, lo que causa mayor riesgo de una infección y puede acarrear también problemas de circulación, entre otras dificultades.
Sobre la misma línea, también se le conoce como: desequilibrio de agua, desequilibrio de líquidos (deshidratación), acumulación de líquidos, sobrecarga de líquidos, sobrecarga de volumen, pérdida de líquidos, edema (desequilibrio de líquidos), hiponatremia, hipernatremia, hipocaliemia e hipercalciemia, estos últimos asociados con desequilibrio de líquidos.