Comenzó diciembre y una de las primeras celebraciones que se festeja en este último mes del año es el Día de las Velitas, una de las fechas más importantes que anteceden a la Navidad.

En Colombia, el 7 de diciembre cuando se encienden las velitas, se conoce como una tradición que tiene sus raíces en la celebración de la Inmaculada Concepción, un dogma de la Iglesia católica que sostiene que la Virgen María fue concebida sin pecado original.

La celebración de Día de Velitas o Noche de Velitas se remonta a la época colonial y se origina en la mencionada celebración de la Virgen, que se conmemora el 8 de diciembre.

Como ocurre con la celebración de la Navidad y el Año Nuevo, fechas en las que las personas recurren a una serie de rituales para obtener bienestar, prosperidad y riqueza, en las Velitas también se aprovecha para pedir deseos.

La celebración del Día de las Velitas da inicio a las fectividades de fin de año.

Cada año, grandes y chicos salen a las calles o a las afueras de sus viviendas para encender sus velas de colores y decorar con faroles como la mejor forma de dar inicio a esa celebración.

Las velas son elementos que producen calor, energía y luz. Estos objetos se utilizan como símbolos de esperanza, de luz, de conexión espiritual y una de las mejores formas para alcanzar sueños y deseos.

Los colores de las velas tienen significados diferentes. La blanca, por ejemplo, está muy relacionada con el equilibrio, la protección y la tranquilidad, por ello encenderla el Día de las Velitas puede ayudar a atraer buenas energías.

Velas amarillas

En el caso de las amarillas, se dice que este color esta relacionado con la abundancia y prosperidad y por ello uno de los rituales que las personas implementan el 7 de diciembre es realizar peticiones en busca de que el año venidero se obtengan buenos resultados en los negocios y no falta la riqueza y el dinero.

Cada color de vela tiene un significado diferente. | Foto: Getty Images

Otra opción de colores es la vela roja, que se asocia con el fuego y la pasión. Es una buena opción cuando se trata de atraer el amor y la sexualidad, por ello encenderla en el Día de las Velitas se relaciona con la posibilidad de que no falte el amor en el año siguiente.

Si se prenden velas verdes, se dice que esto tiene mucho que ver con esperanza y salud; mientras que la azul representa tranquilidad y armonía y la naranja, alegría y el entusiasmo. Una opción más es encender la vela de color morado que representa la espiritualidad.

Oración para rezar en Velitas

El 7 de diciembre al tiempo que se encienden las velitas, las personas creyentes elevan algunas oraciones con el fin de realizar peticiones. La Oración Org indica que una de las que no debe faltar es la de la Inmaculada Concepción.

Oh santísima inmaculada concepción, hoy en este día encendemos una luz en representación de nuestra fe hacia ti madre santa, que entregaste todo tu ser para dar vida a nuestro señor Jesucristo.

Oramos hoy al calor del fuego que emanan estas velas, que hemos encendido una a una, con una intención en especial. Concédenos madre santa cada favor que te hemos encomendado, cúbrenos con tu manto celestial y guíanos por el camino del bien.

Las velitas son el inicio de las festividades decembrinas. | Foto: Getty Images

Santa María, madre de dios, recibe estas luces que hoy encendemos en tu nombre, que cada una de ellas llegue hasta cada uno de los miembros de mi familia y amigos. Para que gocen de buena salud y tengan éxitos en todos sus proyectos.

Una luz por mis enemigos y quienes están mi contra, para que sus malas energías, se conviertan en fe hacia ti, pido por ellos para que nunca les falta nada, por su bienestar y su salvación.

Encendemos también una vela por la paz, hoy en esta noche llega a cada uno de los corazones y borra todos los malos pensamientos, ayúdanos a ser mejores personas, cumpliendo cada una de las enseñanzas que nos dejó Jesucristo.

Bendícenos, madre santísima en esta navidad que se aproxima, que esta época abunde en nosotros el amor, el respeto, la alegría y la unión familiar.

Inmaculada concepción de María, reina de los cielos y de la tierra, ruega por nosotros.

Amén.