El 13 de julio se conmemora el Día Internacional del Sarcoma, un tipo de cáncer que puede presentarse en distintas partes del cuerpo, y el objetivo es concientizar sobre su existente, ya que no es muy común en el mundo.

Es un tumor que nace de los tejidos de sostén del cuerpo, como los huesos, los músculos, ligamentos o los vasos sanguíneos, también conocidos como tejidos blandos. La Organización Mundial de la Salud reconoce 150 tipo de esta patología, de la cual se desconoce el origen o las causas.

Si bien puede afectar a los adultos, es común que aparezca con mayor frecuencia en los niños cuando se trata del osteosarcoma, aquel que ataca los huesos, generalmente de los brazos y piernas.

“El más frecuente es este, que nace del hueso, de las células que dan origen al tejido óseo, que son los osteoblastos. Es importante porque ocurre en una población infantil o cercana a la adolescencia”, explica Luis Carlos Gómez, ortopedista oncólogo del Instituto Nacional de Cancerología (INC).

El experto explicó que en Colombia, los profesionales de la salud están viendo entre tres y seis casos por cada millón de habitantes cada año. Desafortunadamente, debido a la pandemia, muchos pacientes están llegando tarde, ocasionando un aumento en la mortalidad.

Por tratarse de una enfermedad potencialmente mortal, es fundamental que los pacientes reciban tratamiento lo antes posible. De no ser así, el doctor Gómez asegura que las probabilidades de que siga con vida en cinco años es del 20 por ciento. No obstante, si reciben quimioterapia y cirugía a tiempo, hasta el 80 por ciento de los pacientes pueden salvarse.

“Los síntomas son los dolores, pero independientemente de la situación de pandemia, hay que tratarlo. No hay que esperar que pase, porque si no, vamos a tener una mortalidad no solamente relacionada con la pandemia, sino con una enfermedad tumoral potencialmente mortal”, agregó el especialista.

Los pacientes en crecimiento, cuyas células óseas están en reproducción, pueden tener más “errores genéticos”, creando una célula tumoral, que puede convertirse en osteosarcoma.

Signos de alarma de osteosarcoma

Uno de los síntomas más frecuentes es un dolor persistente en una rodilla, durante la noche y que, eventualmente, se asocia con cogera. Aún así, puede aparecer en otras articulaciones.

“Si esto pasa es momento de buscar ayuda, de por lo menos tomarse una radiografía y que sea evaluada por alguien que tenga conocimiento de esto. Afortunadamente en cualquier institución tiene la posibilidad de tener un equipo de radiología y si en esta imagen se observa algo sospechoso, ya se puede diferir a un sitio de tercer nivel”, explicó el doctor.

Además, la hinchazón cerca del hueso o una lesión o fractura ósea sin razón clara, también pueden ser una señal.

Tratamiento

En el caso del osteosarcoma, según Mayo Clinic suele necesitar quimioterapia, cirugía y, algunas veces, radioterapia. “Los médicos seleccionan las opciones de tratamiento en función de dónde comienza el osteosarcoma, el tamaño del cáncer, el tipo y grado del osteosarcoma y si el cáncer se ha diseminado más allá del hueso”, dice el sitio web oficial.